Disfrutar de la etapa final de la vida con el menor número de problemas de salud es un deseo que personas de todo el mundo tienen en común. Aunque la vejez es inevitable, no cabe duda que hay una gran diferencia entre vivir esa etapa con independencia, vigor y energía a hacerlo postrado por la enfermedad. Y a la búsqueda de fórmulas que permitan lograr esto se vienen dedicando numerosas investigaciones por parte de la comunidad científica.
Entre estas investigaciones, una llevada a cabo recientemente en Estados Unidos revela algo sorprendente. La respuesta para tener una mejor calidad de vida en la vejez podría estar en algo tan simple como el agua. La hidratación parece ser clave para reducir a la mínima expresión enfermedades cardíacas, pulmonares y metabólicas, así como minimizar el riesgo de muerte prematura.
Sodio e hidratación
Este estudio analizó datos acerca de la salud de 11255 personas durante 30 años, así como sus niveles de sodio e hidratación. Por lo general el nivel de sodio y el de hidratación presentan una relación inversa, esto es, que a mayor hidratación menores niveles de sodio y viceversa. Por otro lado, también analizaron los niveles de sodio con diferentes marcadores de salud, como pueden ser la presión arterial sistólica, el azúcar sanguíneo y el colesterol. Se aplicaron factores de corrección en relación a aspectos que pudiesen generar confusión en dichas correlaciones.
Los resultados resultaron sorprendentes. Aquellos que tenían los mayores niveles de sodio en sangre tenían un 64% más de probabilidades de desarrollar enfermedades cardíacas o cerebrovasculares, diabetes, demencia, enfermedad pulmonar crónica o enfermedades arteriales. Además de todo esto también se comprobó que estas personas tenían de un 10 a un 15 por ciento más de probabilidades de ser mayores que su edad biológica, es decir de envejecer con mayor rapidez.
LETTER
La importancia de hidratarse adecuadamente
Curiosamente el estudio no evaluó la cantidad de agua que estas personas bebían. El nivel de hidratación se dedujo de sus niveles de sodio en sangre. Esto, por lo tanto, no permite establecer una relación causal directa, pero sí indirecta. Tal y como afirma Natalia Dmitrieva, investigadora del Laboratorio de Medicina Regenerativa Cardiovascular en el Instituto Nacional de Salud (NIH) "los resultados sugieren que una hidratación adecuada puede ralentizar el envejecimiento y prolongar una vida libre de enfermedad".
Este mismo equipo ya había llevado a cabo estudios previos en los que los niveles de sodio elevados en sangre producían un mayor riesgo de insuficiencia cardíaca, por lo que ahora, con estas nuevas observaciones, se añade nueva evidencia sobre la importancia de mantener una correcta hidratación."Mantener una buena hidratación ralentizaría el proceso de envejecimiento y reduciría el riesgo de sufrir enfermedades crónicas" afirma Dmitrieva, que incide en esta conclusión teniendo en cuenta que "la disminución del contenido de agua corporal es el factor más común que aumenta los niveles de sodio sérico".
