En la época estival, se presenta una situación común: la hinchazón en piernas y pies debido a la retención de líquidos. Aunque este fenómeno suele ser pasajero y de naturaleza inofensiva, en ocasiones, podría indicar condiciones de mayor relevancia médica.
La acumulación de líquidos en estas áreas se conoce como edema en términos médicos. A pesar de que la mayoría de los casos son transitorios y no conllevan riesgos adicionales, es crucial reconocer que en ciertos escenarios podría ser un signo de una afección más seria.
¿Cuáles son las causas de los edemas?
Los problemas de circulación que causan los edemas suelen deberse a que el retorno de la sangre desde los pies y piernas hacia el corazón se realiza en contra de la gravedad. Esta circulación antigravedad a veces se complica y da lugar al hinchazón.
La causa más común que dificulta el retorno de la sangre son el calor, problemas hormonales, la genética , el embarazo, el sobrepeso, la actividad sedentaria y el tipo de trabajo. En muchas personas, el simple hecho de estar mucho rato en una posición, ya sea de pie o sentado, puede causar este problema circulatorio.
Como decimos estos son los hechos más frecuentes que causan la hinchazón, pero es importante que un especialista evalúe que no hay otros factores más graves que lo estén causando. Enfermedades como las varices, trombosis, drenaje linfático o el cúmulo de líquidos excesivo en el organismo a consecuencia de problemas como el hipotiroidismo, insuficiencia renal, enfermedades del hígado o, incluso, del corazón pueden también mostrar estos síntomas.
Es por eso que se recomienda que un experto revise una exploración física para descartar que la hinchazón no es por acumulo de líquidos sino por grasa, en cuyo caso aparecen lo que llamamos lipedemas.
Primero, debemos conocer las características de los edemas. Según la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, es posible que tengas edemas si:
- El hinchazón de las piernas, de los pies o de los tobillos que empeora durante el día y se hace más intenso al anochecer.
- Cede con el reposo y la elevación de las piernas.
- Empeora con calor y mejora con frío. El calor o la humedad alta producen vasodilatación en los vasos sanguíneos y conllevan el paso de demasiados líquidos hacia los tejidos corporales. Esta es la razón por la cual en los días nublados o de mucho calor las piernas se sienten pesadas.
¿Cómo evitar la hinchazón?
Una vez que el experto ha descartado enfermedades más graves, podemos hacer esta tabla de ejercicios sencillos durante 30 minutos para mejorar la hinchazón:
- Anda de puntillas.
- Mueve los dedos de los pies.
- Mueve las puntas de los pies hacia fuera y hacia dentro.
- Alterna a apoyarte sobre las puntas de los pies y los talones.
- Túmbate en el suelo y separa las piernas de modo vertical y horizontal.
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También puedes visitar a un fisioterapeuta. Para favorecer la circulación, este especialista puede usar técnicas como el drenaje linfático manual, la presoterapia, los masajes con hielo, los masajes circulatorios y los baños de contraste.
El fisioterapeuta además, tiene un decálogo para prevenir las piernas hinchadas que debemos seguir para evitar las molestias:
- Evita permanecer de pie o sentado mucho tiempo sin moverte.
- Al dormir eleva unos 15 cm la zona de los pies.
- Descansa con los pies en alto.
- Evita las prendas de vestir apretadas.
- No uses calzado ajustado.
- Usa medias de compresión.
- Dúchate alternando agua tibia y fría.
- Realiza masajes circulatorios desde pies hasta muslos.
- Mantén una dieta rica en frutas, verduras y fibra.
- Practica ejercicio a diario.
