Cuidar tus uñas es esencial, sobre todo si trabajas de cara al público, ya que tus manos son una de tus principales cartas de presentación. Aunque mantener una manicura impecable puede requerir tiempo y dedicación, las uñas acrílicas se han convertido en la solución perfecta para quienes buscan lucir unas manos siempre arregladas sin tanto esfuerzo. Además, muchas personas tienen el hábito de morderse las uñas, lo que no solo arruina la apariencia de la manicura, sino que también provoca padrastros y pequeñas heridas.
Las uñas acrílicas ofrecen una alternativa práctica para mantener un aspecto cuidado sin la necesidad de estar constantemente retocando el esmalte o limando las uñas para darles forma. Pero, ¿sabes cómo aplicarlas correctamente? ¿Y cómo retirarlas sin dañar tus uñas naturales?
¿Qué diferencia hay entre las uñas acrílicas y las uñas de gel?
La principal diferencia entre las uñas acrílicas y las uñas de gel se encuentra en el material y el proceso de aplicación. Las uñas acrílicas están hechas de una mezcla de polvo acrílico y líquido monómero que, al combinarse, crean una capa sólida y duradera sobre la uña natural. Una vez moldeadas y aplicadas, las uñas acrílicas cubren perfectamente las uñas naturales, ocultando imperfecciones y proporcionando una base fuerte para el esmaltado.
¿Cómo se ponen las uñas acrílicas?
Aplicar uñas acrílicas en casa puede parecer un desafío al principio, pero con los pasos correctos y un poco de práctica, puedes lograr una manicura profesional sin salir de casa. ¡Mira, mira!
- Comienza limpiando tus uñas naturales para eliminar cualquier residuo de esmalte, aceite o suciedad. Luego, lima suavemente la superficie de tus uñas para que queden un poco rugosas; esto ayuda a que el acrílico se adhiera mejor. Empuja las cutículas hacia atrás y recorta cualquier exceso para que la superficie esté lista.
- Aplica una pequeña cantidad de pegamento en la punta de tu uña natural y coloca la tip, presionando con firmeza para evitar burbujas de aire. Una vez que estén bien adheridas, corta y lima las tips a la longitud y forma deseadas.
- Mezcla el polvo acrílico con el líquido monómero, siguiendo las instrucciones del kit. Con un pincel especial, toma una pequeña cantidad de la mezcla y aplícala sobre la uña natural y la extensión, comenzando desde la cutícula hacia la punta. Extiende el acrílico uniformemente para crear una superficie lisa. Repite este proceso en todas las uñas.
- Modelado y pulido: Una vez que el acrílico se haya secado por completo, usa una lima para darle la forma y el acabado deseados a las uñas. Pulsa la superficie para suavizar cualquier imperfección y lograr un aspecto natural.
- Aplicación del esmalte y decoración: Después de dar forma y pulir las uñas, aplica tu esmalte favorito. Puedes optar por una manicura francesa clásica, un color sólido o añadir diseños creativos como puntitos, dibujos o pegatinas. Si deseas un acabado más duradero, aplica una capa de brillo protector al final.
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Uñas acrílicas: cómo quitarlas
Para quitar las uñas acrílicas sin dañar tus uñas naturales, comienza limando la superficie de las uñas para romper la capa superior, luego empapa almohadillas de algodón en acetona pura, colócalas sobre cada uña y envuélvelas con papel de aluminio. Deja actuar durante 15-20 minutos para que el acrílico se ablande. Retira el papel de aluminio y, con un palito de naranjo, levanta suavemente el acrílico. Si aún está adherido, vuelve a remojar. Una vez retirado, suaviza las uñas con un buffer y, finalmente, hidrata bien con crema o aceite para cutículas para restaurar la humedad perdida.