¿Qué es el aumento de senos?
Se trata de una intervención de cirugía estética o reconstructiva cuyo objetivo es aumentar el contorno y el volumen del pecho. Se practica con anestesia local o general y consiste en implantar debajo del músculo del pecho una prótesis de silicona. El resultado tiene una duración de un mínimo de diez años. En ese momento será necesario sustituir las prótesis por unas nuevas.
¿En qué casos se desaconseja?
Remodelarse el pecho no es un cambio menor. Toda transformación de la apariencia física tiene consecuencias psicológicas sobre la persona que la sufre. Así pues, se trata de una decisión que no hay que tomar a la ligera.
Es altamente desaconsejable que personas que reúnan alguna de las siguientes características se sometan a una intervención de este tipo:
- Inestabilidad psicológica: Personas con depresión, dismorfofobia, trastornos del comportamiento alimentario, que se automutilan... En definitiva, personas que quieren mejorar su autoestima transformando su apariencia, lo cual no serviría apenas de nada. Cuando el problema es básicamente psicológico, sólo es de utilidad la ayuda de un psicoterapeuta. Si después de la terapia la paciente sigue queriendo operarse el pecho, será momento de replanteárselo en serio.
- Respuesta a una demanda externa: ¿Te acompleja la mirada de los hombres? ¿Tu pareja te ha manifestado abiertamente que le gustaría que tuvieras más pecho? Hay muchos motivos que pueden vulnerar tu autoestima y hacer que te plantees un aumento de pecho. ¡Pero, ojo!, es muy importante distinguir entre tus deseos y los de los demás, ya que una vez te hayas realizado la operación, será demasiado tarde para preguntarte: «¿Esto es realmente lo que yo quería?»
- Límite de edad: Por supuesto que existe un límite de edad. Debido a los riesgos asociados a la anestesia, es altamente desaconsejable que mujeres de más de 50 años se sometan a este tipo de intervenciones.
¿En qué casos sí es aconsejable un aumento de mamas?
Los motivos pueden variar dependiendo de la mujer:
- Razones estéticas: Aumentarse el pecho después de una pérdida de peso importante, reequilibrar los pechos de tallas diferentes, mejorar el aspecto y la talla de un pecho excesivamente plano, etc.
- Reconstrucciones: Implantes quirúrgicos tras sufrir un cáncer de mama, por ejemplo.
¿Cuáles son los requisitos indispensables? Estar en buenas condiciones físicas y psicológicas, y ser realista: tras la operación tus senos no serán perfectos. Una intervención de este tipo no cambiará tu vida, pero puede ayudarte a acabar con tus complejos y vivir mejor tu feminidad.
Antes de dar el paso...
Es muy importante elegir bien el cirujano. Éste debe ser capaz de aprobar (o no) tu elección y de darte seguridad respondiendo a todas tus preguntas: ¿En qué consiste la intervención? ¿Qué anestesia elegir? ¿En qué consiste el período de convalecencia? ¿Cuáles son los riesgos postoperatorios? ¿Qué resultados cabe esperar teniendo en cuenta la forma y elasticidad de tu piel?
Después de la primera entrevista, debes concederte un período de reflexión de 15 días durante el cual no debes dudar en volver a acudir al médico si necesitas que te resuelva más dudas.
¿Con qué animo debes acudir el día de la intervención? Segura de ti misma, sin ninguna duda. Los nervios o el estrés pueden provocar complicaciones en un momento tan importante.
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