Los sueños son un mundo intrigante de por sí, pero todavía se convierten en algo más fascinante cuando descubrimos que tenemos la capacidad de tomar cierto control sobre ellos. Lo que se conoce como sueños lúcidos son aquellos en los que tomamos conciencia de que estamos dormidos, por lo que nuestra experiencia onírica cambia radicalmente. En un sueño normal, los acontecimientos suceden sin que exista ningún componente de decisión por nuestra parte, pero cuando sabemos que estamos en un sueño, adquirimos la capacidad de elegir qué acciones queremos llevar a cabo.
Lo creas o no, es posible entrenarse para adquirir esta habilidad de reconocernos en un sueño. Aunque conviene rebajar las expectativas, puesto que por mucho que seamos capaces de influir en el desarrollo de un sueño, nuestro subconsciente siempre nos sorprenderá. Se trata de una aventura excitante que merece la pena explorar y para la que hoy te vamos a dar algunos consejos.
Cómo puedes provocar sueños lúcidos
Si te atrae la idea de poder provocar sueños lúcidos, hay algunas técnicas que pueden resultar de utilidad. No hay garantía de que funcionen siempre, pero sí que pueden ayudarte a lograrlo con cierta frecuencia. Por ejemplo, llevar un diario de sueños en el que apuntes todo lo que recuerdas al despertar, o detenerte varias veces al día para preguntarte si estás despierta o durmiendo, ya que hacer de este un comportamiento regular puede conseguir que te hagas la misma pregunta en sueños y por tanto tengas la capacidad de reconocer que estás dormida.
Pero de entre las técnicas que se utilizan para este propósito, la que hasta ahora se ha mostrado más eficaz, basándonos en un estudio que se publicó en 2022 en Journal Sleep Research, es la de “ensayar” un sueño durante el día, con la intención de que durante la noche se repita. Las técnicas de estudio del sueño todavía tienen un largo camino por delante, pero se van realizando ciertos avances que van ayudando a comprender mejor las implicaciones y efectos de los sueños lúcidos.
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Qué efectos tienen
Este estudio de los sueños lúcidos no está únicamente motivado por la curiosidad de vivir experiencias. De las investigaciones llevadas a cabo hasta ahora se deduce que este tipo de sueños pueden tener efectos beneficiosos. Desde mejorar la calidad del descanso hasta disminuir las pesadillas, pasando por combatir el insomnio e incluso despertarse con mejor humor.
El mundo onírico es todo un misterio por descubrir, y seguro que con el paso del tiempo se irá conociendo cada vez más la aplicación práctica de los sueños lúcidos. En cualquier caso por ahora puede servirte para explorar esos rincones de tu mente a los que tal vez no te atreves a enfrentarte estando consciente o para saber hasta qué punto tu creatividad puede construir realidades paralelas.
