En estas fechas, dedicamos mucho tiempo a pensar en el plato principal o los aperitivos, pero los acompañamientos suelen quedarse en un segundo plano. Sin embargo, elegir la guarnición adecuada puede marcar la diferencia y acompañar a la perfección platos como aves, pescados o incluso opciones vegetarianas. Y si este año te apetece salir de la rutina de las clásicas judías verdes o el puré de patatas, esta receta se convertirá en el centro de todas las miradas. ¡Toma nota!
Ingredientes para seis personas
Para preparar este cremoso gratinado de boniato, necesitarás:
- 800 g de boniato
- 1 diente de ajo
- 60 cl de nata líquida
- 80 cl de leche semidesnatada
- 150 g de mantequilla
- Sal y pimienta al gusto
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Pasos sencillos para un resultado espectacular
Esta receta no solo es deliciosa, sino que también es económica y fácil de preparar. En menos de una hora y media tendrás un acompañamiento de lujo para sorprender a todos tus invitados.
- Enjuaga el boniato con agua limpia antes de pelarlo para evitar que bacterias de la piel lleguen a la pulpa. Luego, córtalo en rodajas finas utilizando un cuchillo o una mandolina para que sean lo más parecidas posibles.
- Coloca las rodajas de boniato en una cacerola con la leche y la mantequilla. Sazona con sal y pimienta al gusto y cocina durante unos 15 minutos a fuego medio. Mientras tanto, precalienta el horno a 180°C (termostato 6).
- Frota un diente de ajo por las paredes interiores de la fuente para gratinar y úntala con mantequilla. Luego, escurre las rodajas de boniato cocidas y colócalas en la fuente de forma uniforme.
- Vierte la nata líquida sobre los boniatos, distribuyéndola de manera uniforme. Añade unos trozos pequeños de mantequilla por encima y, si lo deseas, ajusta la sazón con un poco más de sal y pimienta.
- Lleva el gratinado al horno y déjalo cocinar durante 45 minutos o hasta que la parte superior esté dorada y crujiente.