Inicio / Maternidad / Embarazo

Tu alimentación y fertilidad están conectadas, pero no existe una dieta mágica

por Román Charpentier ,
Tu alimentación y fertilidad están conectadas, pero no existe una dieta mágica© alimentación y fertilidad

El contenido vitamínico y calórico de la ingesta diaria es de gran impacto para la salud reproductiva, sin embargo, no hay algún tratamiento o dieta que garantice el embarazo.

Podemos encontrar algunos anuncios publicitarios en redes sociales que sugieren que existen dietas que garantizan que una mujer puede quedar embarazada más rápidamente. “Cambia tu dieta para quedarte embarazada más rápido. Intenta la dieta de fertilidad de Gina ahora”, es un mensaje publicitario de una historia en Instagram. No obstante, la alimentación que llevemos no garantiza la rapidez para conseguir un embarazo, ni incluso asegurar que pueda ocurrir en algún momento.

La alimentación es de vital importancia al tratarse de la fertilidad como de salud en su conjunto, pero no se considera como tratamiento ni como garantía. La actividad física, el descanso adecuado, hábitos diarios saludables como mantener estados de estrés regulados, no fumar ni beber, entre otras prácticas, influyen en el organismo y en nuestra salud en general para que sus funciones se desempeñen correctamente, entre ellas la reproducción, sin embargo, cabe resaltar que no hay dietas universales ni alimentos milagro para mejorar la fertilidad.

Tenemos acceso a este tipo de publicidad de manera descontextualizada y aleatoria y podría resultar peligroso, de acuerdo a los expertos, quienes sugieren que la alimentación es "un cero o un cien" cuando se trata de fertilidad. Este concepto de "todo o nada" simplifica un proceso muy complejo y que en realidad depende de múltiples factores. “Nos alimentamos con un conjunto de alimentos, no con nutrientes aislados”, explica la vocal del área de Nutrición de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN), Carmen Aragón Valera, diciendo claramente que no existe alimento que por sí solo, y gracias a los nutrientes aportados, que permita lograr una salud inquebrantable ni acelerar una fecundación, ni tampoco una dieta universal que lo pueda lograr. Un caso similar ocurre con las dietas milagrosas para aumentar la masa muscular o perder peso, recomendando a los internautas a sospechar de todo aquello que prometa resultados rápidos con poco esfuerzo.

Cada cuerpo es distinto y un mismo sistema alimenticio no resultará en lo mismo para todas las personas que lo pongan en práctica, sino que existen muchos factores que influyen en la efectividad, tales como la edad, precedentes médicos (endometriosis, virus del papiloma humano, baja reserva ovárica, problemas hormonales), el estrés, el peso, y en general los hábitos del día a día.

NEWS
LETTER
email
Actualidad, tendencias, ocio...¡Y mucho más te espera! ¿Te unes?

¿Cómo afecta la alimentación en la fertilidad?

Como ya sabemos, no existen dietas que garanticen el éxito en la fecundación, a pesar de esto, lo que la mujer come tiene un impacto sobre la salud e interfiere con la fertilidad, de igual forma altera el estado nutricional por exceso o por defecto. “El bajo peso altera la regulación del ciclo menstrual, produciendo desaparición de la regla y de la ovulación. El sobrepeso y la obesidad, por su parte, dan lugar a resistencia a la insulina, que a su vez influye en el funcionamiento del ovario y es uno de los componentes del síndrome de ovario poliquístico, una de las principales causas de infertilidad”, explica la experta, agregando que ambas situaciones suponen un mayor riesgo de aborto y complicaciones, respaldada por su homóloga Federica Moffa, ginecóloga y directora médica de Fertilab Barcelona.

Las especialistas señalan que “es mejor evitar comportamientos que perjudican nuestra salud (tabaquismo, consumo de alcohol, abuso de productos ultraprocesados…) que comer alimentos concretos o seguir dietas específicas que presuman de poder obtener el embarazo más rápidamente”. La dietista-nutricionista Claudia Brassesco coincide con estos señalamientos, y agrega que un déficit de nutrientes y peso saludable puede resultar en que los sistemas reproductivos de la mujer y del hombre no funcionen correctamente, poniendo como ejemplo la falta de omega-3 y antioxidantes que podrían afectar la calidad del esperma.

La fecundación efectiva depende significativamente de la calidad de las células reproductoras masculinas, “La cantidad y calidad de los nutrientes que se toman pueden afectar a la calidad del esperma actuando en el metabolismo energético de esta célula (el proceso que le da fuerza para flagelar y moverse)”, indica un estudio publicado por International Journal of Molecular Sciences. Los autores señalan que las dietas ricas en grasas saturadas presentes en mantequilla, quesos, carnes grasas, entre otros, y bajas en ácidos grasos poliinsaturados provenientes de semillas de girasol, nueces y pescados como el salmón, afecta de forma negativa la calidad del espermatozoide.

En conclusión, debemos de saber que cada organismo es diferente y tiene requerimientos distintos, “No es lo mismo la dieta para una mujer sana que para otra con déficit de vitamina D o con ovario poliquísitico”, señala Moffa, enfatizando que sí es importante comer siguiendo un patrón saludable, de cara al objetivo de la fecundación o a cualquier otro.

Román Charpentier
Durante los últimos 20 años, la prioridad de Enfemenino consiste en amplificar las voces de las mujeres. A través de nuestros contenidos, vídeos y eventos, queremos animar a nuestras comunidades …
Puede interesarte