Puede que haya días en los que piensas que el chocolate lo es todo: ese pilar en el que apoyarte y el único sobre la faz de la Tierra capaz de hacerte sentir felicidad suprema desde el primer encuentro. Lo sabemos, a las golosas empedernidas nos ocurre esto con bastante frecuencia. De hecho, justo esa sensación de que el dulce lo es todo es la que ha querido trasladar al mundo real el artista pastelero Mateo Stucchi. ¿Qué te parece la perspectiva que nos ofrece de los postres de toda la vida?
© Instagram
Estas pequeñas esculturas en miniaturas siempre están protagonizadas por los bizcochos, chocolates, cremas y frutas. Después, él mismo imagina la historia que puede suceder en torno a ellos. De repente, un riquísimo coulant de chocolate se convierte en un trepidante descenso en piragua. O el bizcocho más jugoso resulta ser el lugar perfecto para una escalada. Incluso la tarta de galletas de la abuela tiene su propia historia con una grúa que construye cada una de sus capas.
Picar los frutos secos para los brownies requiere de fuerza y hacha y una fondue de chocolate y fresas puede dar lugar a la más dulce de las ceremonias de boda que hayas visto nunca. Como ves, este pastelero italiano además de tener muy buena mano para los postres, tiene también una imaginación desbordante. ¡No dudes en seguirle la pista en su cuenta de Instagram !
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