Cuando un bebé con menos de un año y que parece estar saludable muere de manera inexplicable, nos enfrentamos al síndrome de muerte infantil súbita. Por lo general, este incidente ocurre durante su sueño, razón por la cual también se conoce como muerte de cuna. La causa de esta tragedia aún no se comprende completamente.
No obstante, los estudios indican que existen dificultades en la zona encefálica del bebé encargada de regular la respiración durante el sueño. Además, se han identificado algunos factores de riesgo que aumentan la probabilidad de que el bebé experimente este fallecimiento repentino. La Clínica Mayo enumera los siguientes:
- Anomalías cerebrales. Sucede cuando la región del cerebro responsable de regular la respiración y el despertar durante el sueño no se ha formado adecuadamente.
- Peso al nacer inferior al promedio. El nacimiento prematuro aumenta la probabilidad de que el cerebro del bebé no haya alcanzado su pleno desarrollo al momento del nacimiento, lo que resulta en un menor control sobre funciones automáticas como la respiración y la frecuencia cardíaca.
- Infección del sistema respiratorio. Un gran número de bebés que experimentaron el síndrome de muerte infantil súbita habían sufrido recientemente un episodio de resfriado.
Debido a que la muerte de cuna ocurre cuando el infante duerme, es crucial estar atentos durante la preparación para el sueño. Existen ciertos elementos relacionados que aumentan la posibilidad de una muerte súbita, como dormir en posición boca abajo, ya que puede generar dificultades respiratorias; compartir la cama con padres, madres, hermanos o mascotas (aunque se recomienda que duerman en la misma habitación por si necesitan asistencia); o estar expuesto a temperaturas excesivamente altas.
Riesgos asociados a las madres
A pesar de no disponer aún de una explicación exhaustiva, los casos analizados de muertes infantiles súbitas han compartido los factores mencionados anteriormente, así como algunos relacionados con la madre. Si la madre consumió sustancias psicoactivas, alcohol o no recibió la atención médica necesaria durante el embarazo, aumenta la probabilidad de que el bebé experimente este síndrome. Lo mismo sucede en casos en los que la madre fuma o tiene menos de 20 años.
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Consejos para prevenirlo
Los expertos sugieren ciertas recomendaciones que se cree pueden evitar la muerte súbita:
- Mantén la cuna con la menor cantidad de objetos posible, utiliza un colchón firme y plano, sin inclinaciones. Evita cubrir al bebé con mantas excesivamente gruesas. No coloques almohadas o peluches en la cuna que puedan presionar su rostro.
- Evita que tu bebé se caliente en exceso y evita cubrirle la cabeza.
- Procura dormir en la misma habitación que tu bebé, al menos durante los primeros meses de vida.
- Amamanta a tu bebé en la medida de lo posible.
- Dale un chupete, esto puede disminuir la probabilidad de síndrome de muerte infantil súbita. Si el bebé no muestra interés en usarlo, no lo fuerces.
- Aplícale las vacunas pertinentes, pues estas resguardan al bebé contra diversas enfermedades, reduciendo los riesgos del síndrome.
