En 2013 el Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO) publicó un ranking con los 10 pinchos más saludables, con el objetivo de evitar ganar peso y en cualquiera época del año. Si eres de las que suspiras por un pincho de tortilla, pero no te atreves a darte el gusto si estás a dieta, estás de enhorabuena: ¡tus tapas favoritas engordan mucho menos de lo que crees! Y es que, una tapa de anchoas con tomate ¡y queso! aportan solo 202 calorías para el body. Toma nota de las calorías de las tapas más famosas (y apetitosas).
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Ahora ya sabes que algunas de las tapas más typical spanish son un tentempié saludable que te puedes permitir de vez en cuando. Pero, como en todo lo que se refiere a tu alimentación, debes moderarte. Toma nota de estos consejos para disfrutar de las tapas sin excesos ni remordimientos:
- Antes de salir de casa a tapear, toma una fruta para no ir con el estómago vacío. Así no tendrás tanta hambre cuando llegues al bar.
- Procura que sean tapas con pan. Al contrario de lo que podría parecer, el pan te llena antes y eso hará que comas menos, pues se trata de hidratos de carbono de absorción lenta.
- Elige las tapas de elaboración más sencilla.
- Si llevan fritos o salsas, confórmate con una sola tapa.
- Mantén a raya el alcohol y los refrescos. No te servirá de nada restringir las tapas si sumas bebida tras bebida. ¿Qué tal una limonada casera?
Y qué es más saludable y menos calórico, ¿tapear o picotear? Si bien ambas opciones sacian instantáneamente tu apetito, es mejor tomar una tapa sana que picotear patatas, aceitunas... En definitiva, alimentos con calorías vacías que van a hacerte sentir hambre enseguida, sobre todo si son muy salados.
A media mañana o a media tarde, una tapa te permite no llegar a la comida o a la cena con un tiempo de ayuno demasiado prolongado. Y es que, cuando pasamos más de seis horas sin comer, tendemos luego a ingerir más calorías de la cuenta en las comidas principales (almuerzo y cena). Así, una tapa puede ser un excelente tentempié para comer algo entre horas sin recurrir a alimentos que esconden muchas calorías como los snacks, los dulces o incluso algunas frutas hipercalóricas.
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