Shop a man es la versión alemana de Adopta un tío y de otras otras plataformas similares. Un conjunto de apps para ligar en la que hombres y mujeres no se consideran iguales: aquí las mujeres quienes en su papel dominante eligen, como si de objetos se tratase, al hombre de sus sueños. Una forma de darle una desacertada vuelta a la forma de flirtear más tradicional en la que el hombre toma la iniciativa y, sobre todo, una respuesta indignante a la cosificación de la mujer, puesto que aquí son ellos los objetos sexuales.
La última iniciativa revolucionaria de la versión alemana de la app ha barrido todos los límites que imaginábamos: ha creado una tienda pop up en la que las mujeres pueden elegir pareja entre los hombres expuestos. Esta vergonzosa acción publicitaria incluye la muestra de los hombres en ropa interior y su colocación dentro de una caja, como si del mismísimo Ken de la Barbie se tratase. ¿Te imaginas que esto ocurriese al contrario? ¿De qué estaríamos hablando si abriesen una tienda en la que los hombres pudiesen elegir mujer igual que eligen su ropa? Sí, sería una forma de discriminación y violencia hacia la mujer.
Por su parte, en la española Adopta un tío todas las campañas giran en torno a conseguir al hombre de nuestros sueños filtrando algunos rasgos de su aspecto físico o repasando lo más destacado de su carácter como si de los ingredientes de una receta estuviésemos hablando. Desde luego, algo que dista mucho de esa búsqueda de igualdad entre géneros.
¿Por qué devolver la misma moneda al machismo extremo y responder con tanto mal gusto? ¿Acaso no hemos entendido que el feminismo es respeto e igualdad para todos?
LETTER
Y además:
Machismo extremo: un puesto de becaria para la que mejor luzca el bikini
Hombres en pantalones cortos al trabajo, ¿sí o no?