Hace unas semanas, una fotografía en la que dos bebés recién nacidos salían abrazándose logró hacerse viral en las redes sociales. La imagen conquistó a todos debido a la cara de felicidad que se le puso a uno de los pequeños al poder estar junto a su hermano, conectado a un respirador artificial. Esta semana hemos conocido la historia que hay detrás de esta bonita fotografía.
Mason y Hawk nacieron el 18 de agosto en el Hospital de la Universidad de Florida, en Gainesville. Mason nació sano y sin complicaciones, pero su hermano gemelo Hawk lo hizo con una anomalía congénita llamada hernia diafragmática, que se caracteriza por una abertura anormal en el diafragma y que le impedía al pequeño, entre otras cosas, poder respirar con normalidad. Un día, Hawk se mostraba especialmente inquieto, por lo que una enfermera del hospital sugirió a la madre de los niños que colocasen a su hermano a su lado. Esta es la fotografía del primer momento en que ambos bebés entraron en contacto físicamente, once días después de su nacimiento:
La tierna imagen de los pequeños se viralizó rápidamente en las redes sociales y miles de personas se interesaron por conocer la historia de estos hermanos. Por eso, la familia de los niños creó una página en Facebook donde día a día iban transmitiendo la evoulición de Hawk.
"Los niveles de bilirrubina de Hawks son muy altos, necesitamos seguir rezando para que continúe luchando y tenga más fuerza. Aún no es lo suficientemente fuerte como para respirar el solo. ¡Gracias a todos los que habéis compartido su historia y seguís enviándonos vuestras plegarias!", escribía la madre de los niños el 2 de septiembre junto con una imagen del pequeño en la incubadora.
Tan solo dos días después, el niño empezó a mejorar: "No queremos hacernos ilusiones, ¡pero Hawks ha tenido dos días muy buenos! Su tripa ya no está tan hinchada por la cirugía y esta tarde ha estado más despierto que nunca. Gracias a todos por vuestras oraciones y mensajes".
Sin embargo, el pasado miércoles, los padres de los gemelos publicaron un mensaje que ha conmovido a todos aquellos que ha estado siguiendo la historia de Hawks. El pequeño no pudo superar la enfermedad y finalmente murió. "Nuestros corazones están tristes esta mañana porque nuestro dulce hombrecito ha sido llamado a casa para estar con Jesús. Se fue con mucha paz y sabemos que ya no sufre. Por favor, dadnos un poco de tiempo para llorar e intentar comenzar el proceso de recuperación".
Un final injusto para una historia que ha conmovido a muchas personas y que nos ha dejado una de las imágenes más tiernas que hemos visto en mucho tiempo.
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