Desde que surgiera hace más de 20 años, esta dieta no ha dejado de ganar adeptos. Eso sí, no os vamos a engañar, se trata de un proceso corto pero sujeto a varias exigencias que no podréis pasar por alto si queréis conseguir vuestro objetivo. Los dos elementos primordiales de esta dieta son el huevo y el pomelo, pero no podéis dejar a un lado las ensaladas, un plato muy socorrido y saludable que os ayudará en vuestro propósito de pérdida de peso. A continuación os mostramos una selección de las mejores ensaladas a las que no nos hemos podido resistir. ¡Tienen una pinta exquisita! Pero eso sí, hazlas en su versión más ligera posible.
© iStock
¿En qué consiste la Dieta Mayo?
A pesar de ser un tanto restrictiva, la Dieta Mayo sigue unas premisas muy sencillas, pues se basa en la necesidad de controlar los aportes calóricos diarios, potenciando la presencia de las proteínas en nuestro menú y reduciendo los hidratos de carbono. De esta manera, y siguiendo a rajatabla los menús que propone esta dieta, podréis hacer tres comidas al día que en total sumen menos de 1000 kcal durante dos semanas.
Durante los más de 20 años que avalan dicha dieta, los resultados que conseguiréis siguiendo escrupulosamente sus pautas serán notorios, pues podréis perder entre 5 y 7 kilos. Eso sí, deberéis tener en cuenta el desequilibrio nutricional que supone dicho proceso durante estas dos semanas y el posible riesgo de aumentar del nivel de colesterol, por lo que es importante recurrir a vuestro médico o nutricionista para saber si eres apta para hacer esta dieta o en el caso de que haya alguna complicación. En este caso, no hay milagros y las cuentas son claras, ingiriendo muy pocas calorías puedes llegar a perder mucho peso.
Los productos estrella y los alimentos prohibidos
En la dieta Mayo el pomelo forma parte de un plan de adelgazamiento, ya que es el elemento que nos ayudará a quemar grasas, al igual que los huevos. De hecho, entre sus pautas se propone comer ¡hasta 6 huevos al día!, ya que son ricos en proteínas, pobres en calorías, y provocan una rápida sensación de saciedad. Esto, mantenido en el tiempo, es una locura para tu propia salud, así que en caso de que hagas la dieta (nosotras te recomendaríamos hacer dietas más saludables o, directamente, llevar una vida sana y no hacer dieta), no lo prolongues en el tiempo.
En cuanto a los alimentos prohibidos, la restricción es notoria, por lo que deberéis dejar a un lado los siguientes:
- Materias grasas.
- Azúcares.
- Alimentos con alto contenido en fécula.
- Legumbres.
- Productos lácteos.
- La mayoría de las frutas, salvo el pomelo.
El menú en tres comidas diarias
Una de las particularidades de esta dieta es que reduce el número de comidas diarias a tres, desayuno, comida y cena. A continuación os desglosamos las distintas propuestas para cada una de las comidas:
- Desayuno: 1/2 pomelo, 2 huevos cocidos, café o té sin azúcar o 1 tostada.
- Comida: 2 huevos (preparados sin materia grasa) o alternar con 100 gramos de carne, tomates a voluntad,1/2 pomelo, café o té sin azúcar.
- Cena: 2 huevos, lechuga, apio, pepino a voluntad, 1 tostada, café o té sin azúcar.
Ventajas e inconvenientes
Entre las ventajas podemos citar que se trata de una dieta fácil de llevar a cabo, pues no requiere una excesiva preparación culinaria. Además, cuenta con una tasa calórica tan reducida, que la pérdida de peso es inminente.
Sin embargo, como suele ocurrir en todas las dietas, cuenta con ciertos inconvenientes, como el hecho de que no pueda durar más de 14 días ya que, si se superase dicho período, pondríais en peligro vuestro sistema metabólico debido al bajo e insuficiente aporte calórico que recibe vuestro organismo. Además, deberéis de prestar atención a las siguientes advertencias:
- Las carencias en proteínas, calcio, potasio y vitaminas son inevitables.
- Esta dieta puede provocar cansancio e incluso mareos pues el organismo recupera su energía en los tejidos adiposos (la grasa), pero también en los tejidos musculares.
- Los huevos son ricos en colesterol, y a largo plazo un nivel alto del mismo provoca riesgo cardiovascular.
- La sensación de hambre es elevada.
- Los kilos perdidos se pueden recuperar muy deprisa, e incluso se pueden ganar más kilos debido al efecto yoyó.
- Seguir una dieta de este tipo puede provocar un empacho de huevos durante mucho tiempo.
Por ello, para evitar males mayores, no olvidéis llevar a cabo una alimentación saludable que os permita mantener vuestros niveles de nutrientes, proteínas y vitaminas en su sitio. Además, la práctica de cualquier tipo de deporte os ayudará a despediros de esos kilos de más sin correr ningún tipo de riesgo. ¡Tomad nota de estos consejos que te ayudarán a sentiros mejor con vosotras mismas!
© iStock
LETTER
Y además:
Dieta detox: todo lo que debes saber para depurar tu cuerpo
Las mejores dietas para adelgazar, ¿cuál es la tuya?
