Etapa 1: limpiar
Comienza por quitar el polvo del mueble. Trapo del polvo, plumero, cepillo de dientes... cualquier cosa es buena para borrar el polvo del mínimo rincón. Los ácaros destruyen, equípate de guantes de caucho para proceder a un lavado con detergente. El detergente Saint-Marc junto con agua caliente conseguirá limpiar la suciedad más tenaz.
A saber: Después de este tratamiento de choque, es obligatorio aclarar. Para el secado, elige un lugar aireado y a la sombra.
Etapa 2: preparar la superficie
Dile adiós a la cera, al barniz o incluso a la pintura original. Para que tu nueva decoración se mantenga hay que eliminar todas las huellas del pasado.
- Para hacer desaparecer la cera tenemos dos soluciones: la primera utilizar una mezcla de agua y sosa (un vaso de sosa por cada 8 vasos de agua), la segunda comprar un producto especial para quitar la cera.
- Para eliminar el barniz, prepara una mezcla con las mismas dosis de agua oxigenada y de amoniaco. Una solución 100% eficaz.
- Por último, las capas de pintura caerán bajo la amenaza de tu espátula y de tu fuerza hercúlea. Pero si el acabado es espeso, será mejor que utilices una herramienta térmica de decapar.
- Para terminar, aún tendrás que lijar el mueble, con la ayuda de un papel de lija en el sentido de las vetas de la madera. No te olvides tampoco reparar las grietas y los arañazos del mueble gracias a la pasta de madera.
A saber: Si tu mueble tiende de repente a un color más oscuro, ¡qué no cunda el pánico! Algunas especies, como el castaño o el roble, oscurecen después de lavarse. Utiliza entonces lejía (un vaso por litro de agua) para aclarar de nuevo tu mueble.
Etapa 3: decorar
Una vez terminadas la limpieza y el decapado es el momento de dar rienda suelta a la imaginación para dar un nuevo acabado a tu mueble.
- Las ecologistas nostálgicas y los puristas de las maderas chinas preferirán el resultado natural de una cera incolora o ligeramente tintada.
- Las decoradoras de tendencias adoptarán sin duda una laca de color ácido por el interior y más neutra por el exterior para conseguir un efecto sofisticado.
- Las fans del estilo Gustaviano apreciarán los muebles lacados o recubiertos de una pátina o de pintura para cerámica.
- Las posibilidades decorativas son múltiples: plantillas de estarcir, collages, dorados, papel pintado...
- La guinda del pastel: acuérdate de reemplazar los picaportes o tiradores originales por otros más actuales. Adornos de pasamanería o tiradores de estilo industrial... a tu elección.
LETTER
Y además:
El color marrón en decoración
Cómo limpiar la madera