Un clásico que ha sabido renovarse y que hoy en día forma parte de la decoración de muchos espacios interiores. La mezcla de estilos que reina en el mundo del interiorismo ha dado cabida a la utilización de estas piezas señoriales en su estilo más tradicional, así como en sus versiones más renovadas con toques modernos, distintos materiales y colores que nos han conquistado por completo.
Los salones y comedores (su típico lugar es sobre la mesa del comedor) son los lugares en los que mejor encaja por naturaleza pero también son ideales para aquellos pisos o lugares en los que los techos son muy altos, por ejemplo, las casas antiguas o los modernos loft.
Es recomendable que no optes por este tipo de lámparas para pisos pequeños o apartamentos poco espaciosos ya que crearán la sensación de estar en un espacio todavía más pequeño.
Pero si seguimos las últimas tendencias las lámparas de araña se han expandido fuera de sus territorios más clásicos y nos encanta la idea de colocarlas tanto en dormitorios como en baños o incluso, pasillos y escaleras.
Si queremos incluir una de estas lámparas en una determinada estancia de nuestro hogar debemos ser conscientes de que el protagonismo absoluto lo copará esta por lo que, la decoración por la que optemos para el resto de la habitación no debe ser muy cargada.
Los ambientes vanguardistas y minimalistas serán los idóneos ya que aportan un toque distinguido a las piezas más antiguas, como es el caso de las lámparas de araña.
Este tipo de lámparas se caracterizan por sus numerosos brazos que recuerdan a una araña boca abajo, de ahí su nombre. Aunque también las reconocerás por otra de sus señas de identidad las piedras preciosas, y es que las lágrimas de cristales ya sean en tonos oscuros como más claros y transparentes hacen de estas uno de los accesorios de decoración que más se aproxima a los entornos más lujosos. Existen infinidad de variantes como las que tienen tulipas (pequeñas pantallas), candelabros o las más modernas, con cables a la vista y bombillas tanto en su exterior como escondidas en su interior.
¡Aptas para habitaciones infantiles!
Entre las versiones más modernas y renovadas de este tipo de lámparas encontramos aquellas que se adaptan a la perfección a las habitaciones de los más peques. Los colores vivos como el rojo, el fresa, el amarillo, el azul, el turquesa, el verde... ¡son ideales para los dormitorios de los niños! Aportarán un toque divertido y retro que les encantará tanto a ellos como a ti.
Si todavía no te has decidido por las lámparas araña aquí tienes más diseños que darán estilo a tu hogar.
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