Mucho hemos hablado hasta ahora de las formas del pene, de su tamaño medio alrededor del mundo e incluso de lo que la ciencia considera qué es un pene normal. Pero ya es hora de cambiar de tema y centrarnos en lo que de verdad debería importarnos a nosotras: los diferentes tipos de vaginas que existen.
Son una parte increíble de nuestro cuerpo, pero lo cierto es que no las conocemos lo suficiente. Quizá por pudor o tal vez por falta de información. Lo que está claro es que estamos acostumbrados a ver penes por doquier: en los cómics, en los grafitis, en los dibujos a lápiz que nuestros compañeros hacían en sus pupitres... ¿Pero qué ocurre con las vaginas? ¿Hasta qué punto las conocemos?
Probablemente incluso tú, que tienes una, la confundas con la vulva (y no, no son lo mismo). Así que, para evitar confusiones y poder llamar por fin a las cosas por su nombre, vamos a profundizar un poco más en el maravilloso mundo del aparato reproductor femenino. Porque ya es hora de dejar a un lado los eufemismos que nos inculcan desde la infancia y que alimentan el tabú sobre esta parte del cuerpo: nada de chichi. Vagina. ¡Hay que decirlo más!
No es lo mismo vulva que vagina
Primero, hablemos con propiedad. Porque es muy probable que cuando digas vagina, a lo que realmente te estés refiriendo es a la vulva.
- La vulva integra todos los órganos sexuales externos, que son: el monte de venus, labios externos e internos, clítoris, glándulas vestibulares, el orificio uretral (por donde orinamos) y el inicio de la vagina. Es, prácticamente, todo lo que podemos "ver".
- La vagina se considera un órgano interno, pues se trata del canal hacia el cérvix y el útero, la parte final del canal del parto, el canal de salida de la menstruación y el orificio por el que (hablemos claro) se introduce el pene durante las relaciones sexuales.
Si hablamos de sexualidad, no olvidemos mencionar al clítoris como protagonista fundamental. Ubicado en la parte superior de la vulva y recubierto en parte por los labios menores, es el principal regulador de nuestro placer y a través del cual llegamos al orgasmo. Solo vemos una parte de este órgano eréctil (de forma redondeada) mediante la estimulación directa o indirecta.
¿Qué tipos de vaginas y vulvas existen?
En realidad esto es algo que no se puede clasificar rigurosamente, pues ocurre como con cualquier otra parte del cuerpo: todas tenemos algo parecido, pero nunca va a ser exactamente igual. Cada cuerpo es diferente, aunque en ocasiones solo sea ligeramente.
No obstante, como ocurre con todas zonas de nuestra anatomía las vulvas también pueden tener looks y aspectos distintos entre sí: existen vulvas de gran tamaño, vulvas peludas, vulvas más carnosas, depiladas, con los labios internos o externos más largos, con arrugas, más oscuras que el tono de la piel predominante, más rosadas, aparentemente cerraditas, desplegadas... La vagina, al igual que la vulva, no es estática sino que se va modificando en una misma mujer con el paso del tiempo y las distintas situaciones de la vida. Y, probablemente... ¡se vuelvan más sabias!
Cuando la mujer está excitada, la vagina se lubrica o moja, para facilitar la entrada del pene. Y, frente a la inminencia de un orgasmo, la vulva se pone más colorada y tensa. La mayor parte del tiempo, la vagina se encuentra en un estado de relajación, aunque casi siempre está húmeda gracias al flujo vaginal. Es fundamental cuidar su higiene con jabones neutros (recomendados por el ginecólogo) que neutralicen el PH natural, de esta manera evitamos picazón, ardores innecesarios, mal olor e, incluso, prevenir más de una infección vaginal.
Hemos querido rescatar una curiosa clasificación que se volvió viral. La de Mel, una esteticista especializada en depilar esta zona, que contó en este artículo que, tras "haber visto miles de vaginas" (aquí deberíamos decirle que a lo que en realidad se refiere es a la vulva), ha podido clasificarlas en cinco tipos de "vaginas" diferentes a los que ha puesto nombre y forma según determinadas características:
- Srta. Barbie: el tipo de vulva que todos imaginan cuando piensan en esta zona del cuerpo, pero que pocas mujeres tienen. Se da cuando los labios mayores tapan completamente los menores.
- Srta. Cortinas: mucho más común que la anterior; se da cuando los labios menores sobresalen más que los mayores.
- Srta. Buñuelo: un tipo de vulva parecida a la primera, pero más frecuente. La diferencia es que los labios "abultan más" debido al tamaño del hueso púbico.
- Srta. Herradura: denominada así por la "abertura" en la parte superior, por la que asoman los labios menores, mientras que por abajo los tapan los mayores.
- Srta. Tulipán: este tipo de vulva es llamada así por la similitud de su forma con el capullo de esta flor. Los labios menores están expuestos a lo largo de toda la longitud de los labios mayores.
Después de esta divertida y certera clasificación sobre los tipos de vulvas, poco queda que añadir. Recuerda que tu vagina es única. Conócela, cuídala, rompe con los tabúes y, por supuesto, ¡disfruta del placer que te puede proporcionar! Ah, y no te olvides de compartir la información para acabar con el desconocimiento que reina en torno a ella.
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