A veces, el tiempo es el peor enemigo de cualquier relación. Las mariposas de las primeras citas echan a volar y con el paso de los meses, aunque siga habiendo mucho amor, ya no hay ese enamoramiento exacerbado de los primeros momentos. Y es entonces cuando surgen algunos pensamientos como imaginarte la vida sin él que, incluso en ocasiones, te provocan remordimientos y te hagan pensar que nunca jamás se lo confesarías. ¡Pero le pasa a todo el mundo! Y apostamos a que también les ha pasado, o les pasó, a algunas de estas bonitas parejas de Hollywood que tanto hemos idealizado.
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Por eso hemos recopilado 18 secretos inconfesables que le ocultamos a nuestros novios para ver si coinciden con los tuyos. A nosotras, desde luego, ¡se nos han pasado casi todos por la cabeza!
1. Si estuviera soltera, intentaría totalmente tener algo con su amigo
Sí, porque tu chico es increíble, te parece el más guapo del mundo y te trata como a una reina. Pero siempre tiene un amigo que te da un morbo especial, que es híper simpático y del que le hablas constantemente a tus amigas para ver si tienen algo con él. Y tú, que le deseas una relación tan bonita como la tuya, sabes perfectamente que te postularías para ello si tu novio no estuviera en tu vida.
2. A veces uso la regla como excusa para no tener sexo
Es el "me duele la cabeza del siglo XXI". Ya no nos da vergüenza hablar abiertamente sobre este tema y es una de las excusas estrella. Porque puede que te encante tu chico pero hay veces que, simplemente, preferimos estar abrazadas a él que teniendo sexo.
3. Este no es el primer Kinder Bueno que me como hoy
Es una chorrada, pero más de una vez hemos minimizado lo que hemos comido ese día antes de verle para que no piense que nos pasamos todo el día ingiriendo calorías, cuando a él, en el fondo de tu corazón, sabes que le da exactamente igual.
4. Odias esos pendientes que te regaló
Y no solo los pendientes: también la blusa, el anillo, los zapatos... ¿No les parece raro que no te valga absolutamente nada de lo que te compra?
5. A veces piensas en tu ex
A veces te preguntas qué será de él, si estará con otra persona, si seguirá en el mismo trabajo... Incluso cómo sería si siguieseis juntos. Normalmente no tiene gran relevancia, son pensamientos fugaces y terminan en un "ahora estoy mucho mejor". Pero sí, todas lo hacemos. Y más si eres ella.
6. Besarle no es tan excitante como solía ser
Aquellos excitantes y tórridos primeros besos se fueron y lo sabes. Lo bueno es que tenéis tanta confianza (o deberíais tenerla) que ahora puede hacerte otras mil cosas para que te tiemblen las rodillas.
7. No ves ese reality porque no hayas cambiado de canal por casualidad
Por mucho que se lo ocultes, estás enganchada a ese reality, a ese programa del corazón y/o a esa telenovela. Si alguna vez te lo echa en cara, recuerda que él está enganchado exactamente a las tres cosas juntas en esos debates de fútbol que ve.
8. Te molesta profundamente que se haga el "machito"
Y con esto nos referimos a fanfarronear delante de sus amigos (o peor aún, de los tuyos), tirarse eructos, poner los pies sobre la mesa y otras de esas cosas que a muchos hombres les parece gracioso pero que ninguna de nosotras aguantamos.
9. Te preocupa un poquito que se quede calvo
Y, sobre todo, que le crezcan pelos donde antes no solía haber: orejas, nariz, espalda... Porque el tiempo parece que va cambiando el pelo de sitio y, por mucho que le ames, no quieres que a su cabeza le pase lo que a la de Jude Law al menos durante unos años más. Aunque, si les queda tan bien como a estos famosos, tampoco sería un gran drama.
10. Tienes muchos sueños eróticos y él no está en ninguno
Y a él también le pasará. Probablemente nunca habléis de ello (tampoco hay necesidad) pero es una realidad. Y quién podría culparnos, con Hugh Jackman en este mundo.
11. Has echado un vistazo a su Whatspp (y no ha sido accidental)
Muy típico. Te enseña cualquier cosa en su móvil y tus ojos adquieren una ultra velocidad increíble con la que eres capaz de echar un vistazo a todo en microsegundos. Es lo más cercano a un superpoder que tendremos.
12. Tus amigas saben exactamente cómo de bueno es en la cama
Tanto si es muy bueno (y por tanto quieres que todo el mundo lo sepa) como si es malo (y necesitas consejo sobre cómo actuar), tus amigas tendrán información muy detallada de cómo es en la cama. Algo que, ni bajo tortura, confesaríamos que haya sucedido.
13. Imaginas de vez en cuando cómo sería tu vida sin él
Es natural, y no porque queramos que nuestro chico se vaya de nuestro lado, pero de vez en cuando es lógico pensar en cómo sería tu vida si volvieras a estar soltera. Si esta idea persiste demasiado, tal vez es que tu relación no pase por una buena etapa o él no sea el chico adecuado para ti. Pero por norma general, no te sientas mal si piensas cómo sería tu vida sin él. ¡Incluso él lo pensará!
14. Tienes una idea muy exacta de cómo te debería pedir matrimonio
Tenemos muy claro cómo deberían pedirnos matrimonio. A la mayoría de las chicas nos gusta fantasear con estas cosas, qué le vamos a hacer. Y aunque es posible que ese momento nunca cumpla las expectativas de lo que las pelis de Disney nos han metido en la cabeza, recomiéndale sutilmente una gran pequeña muestra de amor (como hincar rodilla y anillo convencional).
15. Él no es del todo consciente de tu adicción a la ropa
¿Qué tiene en común cuando le dices que te vas a dar una vuelta, que has quedado con tus amigas o que vas a andar un poco a la que salgas del trabajo? Que cualquiera de esas ideas tiene un objetivo claro: entrar en Zara.
16. Te pone triste que no te diga que le gusta tu peinado
Después de dos horas arreglándote para que te vea guapa, si ni siquiera es capaz de darse cuenta o de decírtelo, pues sí, nos pone un poco tristes.
17. El sexo no ha sido lo que esperabas
Esto es común al principio de la relación, especialmente después de la primera noche juntos. Siempre, SIEMPRE, va a ser un desastre. Los dos estáis deseando que todo vaya bien, no conocéis aún el cuerpo del otro, queréis dar el 100%... Y los nervios os juegan una mala pasada. En ese momento se te cruza algún que otro pensamiento de decepción, pero no sufras ni un segundo: ¡con la práctica todo irá como la seda!
18. Estás un poco obsesionada con él
Dos, tres, cuatro años con él, y aún sigues asustadísima pensando en perderle. Otras veces te preocupa que conozca a otra persona que le parezca más interesante que tú, o encuentras algún olor que te recuerda a él caminando por la calle, o miras fijamente sus fotografías... También estás deseando verle cuando no estáis juntos y no paras de pensar en hacer planes de futuro. Sí, estás totalmente enamorada y, por lo tanto, algo obsesionada con él. Tal vez nunca pensarías en decirlo muy abiertamente, pero tal vez estaría bien dejárselo caer.
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