No, no te lleves las manos a la cabeza al leer el titular de nuestro artículo. Aunque creas que unas zapatillas no peguen ni con cola con un vestido de novia, espérate a ver las que ha diseñado Kate Spade para la firma Keds. Después de ver su colección, lo cierto es que la idea de llevar zapatillas el día de nuestra boda no nos parece para nada descabellada.
No es ninguna locura que las novias de hoy en día prefieran calzar un zapato plano en su gran día. De hecho es algo que se ha puesto muy de moda últimamente. Piénsalo: te ahorras tener dolor de pies, evitas las temibles rozaduras y, lo mejor: son tan cómodas que te permiten disfrutar de tu boda, bailar, saltar e ir de acá para allá saludando a tus invitados.
Y es que al fin y al cabo, los tacones no son más que un convencionalismo. Y ya es hora de romper con él, ¿no? Si aún no estás muy convencida, después de ver lo bien que quedan estas zapatillas para novias seguro que cambias de idea:
Las zapatillas de Keds van desde los 80 a los 120 euros, pero como ves en las imágenes, en realidad cualquier sneaker resultona puede encajar bien con tu vestido. ¡Incluso unas Convers blancas! Los colores claros, dorados y metalizados y los pequeños detalles como los lazos de raso, las perlitas o el glitter convierten a estas zapatillas en una opción muy cómoda para muchas novias.
Estilo, glamour y comodidad, ¿qué más se puede pedir el día de tu boda? Y oye, ¿no se casó Olivia Palermo con un sencillo jersey de cachemire? Hoy en día, hasta las influencers rompen con los moldes en el mundo de la moda. ¡Atrévete tu también!
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