La mujer catalana María Branyas menciona en su biografía de la plataforma X: "Soy vieja, muy vieja pero no idiota". Y es ahora que el Instituto de Investigación contra la Leucemia Josep Carreras conducirá un estudio para investigar la genética de esta anciana, con el objetivo de entender mejor lo que hay detrás de su estado de salud, que es impecable.
El director del instituto y además catedrático de la Universidad de Barcelona, Manuel Esteller, es el precursor de este estudio, y explica que su curiosidad científica le llevó a visitar a Branyas en su morada de Olot, Girona. “Tiene más de 116 años de edad cronológica, lo que marca el reloj, el calendario, pero estudiando su material genético en el laboratorio ya vemos que es más joven”, explicó el investigador, quien tomó muestras de sangre, orina y saliva de la mujer, las cuales podrían ser las muestras biológicas más longevas que existen en la actualidad, por lo que son de gran valor. Dichas muestras serán comparadas con las de su hija de 79 años de edad.
“Está claro que hay un componente genético, porque hay varios miembros de su familia que superan los 90 años”, señaló el científico en entrevista. Por su parte, la Superabuela expresa en sus redes sociales que estas muestras son su última contribución. "Cuando el doctor Estell me preguntó ‘¿qué espera de la vida?’, mi respuesta fue muy clara: ‘la muerte’", escribió la abuela.
La complicada vida de María Branyas
Branyas vio la luz por primera vez el 4 de marzo del 1907 en San Francisco, Estados Unidos, y se instaló con su familia en Barcelona en 1915, permaneciendo en Cataluña por el resto de su vida. Este viaje de vuelta al continente europeo resultó en la muerte de su padre por tuberculosis pulmonar durante el trayecto, y también en una lesión sufrida por la misma Branyas mientras jugaba con sus hermanos, por la que perdió la audición de un oído permanentemente, de acuerdo al relato de Guiness World Records.
Fueron además dos Guerras Mundiales, la Guerra Civil Española y la pandemia de gripe española lo que la anciana vivió. También tuvo que luchar contra el COVID-19, del cual estuvo contagiada a sus 113 años de edad.
Tiene su cuenta en la plataforma X desde el 2019, lleva el nombre de Super Àvia Catalana (Superabuela catalana), con aproximadamente 13,600 seguidores de sus publicaciones, donde escribe acerca de sus vivencias y su familia, que son tres hijos, once nietos y trece bisnietos.
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