La llegada del bebé, ese momento tan esperado, lleva también consigo cambios drásticos en tu día a día que hasta que no los vives en tu propia piel no los valoras como se debe: cambios de rutina, nuevas prioridades, noches de insomnio... En poca palabras, tu mundo está patas arriba, algo que también puede provocar ciertos cambios en tu relación, especialmente las primeras semanas. Porque, aviso spoiler, vas a experimentar un caos de nuevas emociones. Y entre comprender por qué llora el bebé y el cansancio del que intentas sobreponerte, tu papel como madre -sobre todo en mamás primerizas- provoca que el apetito sexual sea prácticamente inexistente. Algo que si bien puede ser estresante para la relación de pareja, también es completamente natural.
Pero no te preocupes porque, afortunadamente, el momento de la primera relación sexual tras el parto llegará. Sin más preocupaciones, sin obsesionarte. Simplemente surgirán de nuevo las ganas y te sentirás preparada. Y es importante que resuelvas algunas de las preguntas más importantes: ¿Dolerá? ¿Cuándo podré tener sexo? ¿Cómo debo utilizar los métodos anticonceptivos? ¿El embarazo y el parto han provocado algún cambio en mi cuerpo y en mis futuras relaciones?
¿Cuándo podré volver a mantener relaciones?
La mayoría de ginecólogos aconsejan esperar de cuatro a seis semanas antes de mantener relaciones sexuales por primera vez después del embarazo. Este tiempo de espera se debe a que cuando la placenta se desprende, queda una herida en el útero de la mujer que necesita sanar, por lo que existe un riesgo de infección muy alto que conviene evitar. No obstante, aun así hay parejas que por algún motivo -las ganas- deciden no esperar el tiempo recomendado. En estos casos, las relaciones sexuales deben ser siempre con preservativo, para minimizar al máximo el riesgo.
Por otra parte, también pueden experimentarse dolores por algunos motivos como que el pene choque contra el útero durante el coito porque este todavía no se ha recuperado o molestias producidas a raíz de una episiotomía durante el parto.
Por estos motivos es importante que esperéis y dediquéis el tiempo necesario a sentiros bien en pareja. En un periodo en el que tu relación con el sexo está en constante evolución, mantener por primera vez relaciones sexuales satisfactorias es muy importante para reconciliarte con el deseo.
¿Qué ha cambiado en mi cuerpo?
Tanto a nivel físico como emocional los cambios que conlleva un embarazo son evidentes: durante nueve meses una personita nueva ha crecido dentro de ti hasta que la has tenido entre tus brazos. Esto no es cualquier cosa. Por ejemplo, a nivel físico si el parto es natural, la presión sobre el bebé a través de la vagina va a provocar que esta se ensanche durante un tiempo. Por ello, es importante realizar ejercicios de gimnasia que entrenen el suelo pélvico para ayudar a que todo vuelva a su sitio y esto no afecte a tus relaciones.
Además, durante la lactancia el nivel de estrógenos en tu cuerpo es un poco más bajo que de costumbre, por lo que no vas a lubricar igual durante las relaciones y por lo tanto pueden resultarte un poco dolorosas. Pero no te preocupes, solo necesitas dedicarle un poquito más de tiempo a los preliminares hasta que te sientas preparada, o utilizar un lubricante para que te dé ese empujoncito.
Y a nivel emocional, también son muchas las implicaciones. Después del embarazo, el cuerpo experimenta grandes cambios relacionados con el peso que pueden hacerte sentir en cierta forma insegura, pero que se van a ir corrigiendo poco a poco. Dales tiempo, realiza ejercicios que te ayuden a recuperar la confianza y cuida tu alimentación. Tu cuerpo volverá poco a poco a ser el que era con un poco de ayuda.
Cómo conseguir que el sexo vuelva a ser divertido
Volver a mantener relaciones tras el nacimiento del bebé es muy emocionante y para muchas mujeres, casi como una nueva primera vez. Están ahí las inseguridades, las risas nerviosas, la expectativa de cómo será... Tómatelo de forma divertida, desenfadada, como un nuevo comienzo, y sobre todo con calma. La complicidad va a marcar el ritmo de vuestra relación y va a volver a normalizar estos momentos.
No olvides los anticonceptivos
Olvídate de rumores y teorías de que no te vas a quedar embarazada de nuevo hasta un año después del parto. Porque solo son eso: rumores y teorías infundadas. Los anticonceptivos siguen siendo totalmente necesarios si no deseas quedarte embarazada de nuevo.
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