Los hábitos que llevamos día a día afectan a nuestra salud de forma general, para bien o para mal. Uno de los aspectos que puede salir perjudicado o beneficiado por estos hábitos puede ser la fertilidad. Si estás experimentando problemas para lograr el embarazo, puede ser recomendable corregir algunas de esas costumbres y llevar una vida más saludable. Aunque es fundamental que consultes a tu médico para que estudie tu caso de forma específica, a continuación repasamos algunos de los hábitos diarios que más impacto negativo pueden tener sobre la salud reproductiva.
1. Llevar una mala alimentación
Llevar una alimentación desequilibrada puede boicotear tus intenciones de quedarte embarazada. El consumo excesivo de productos procesados, grasas animales, azúcar refinado o sal no es nada favorable para la concepción. Además, estos favorecen el sobrepeso y la obesidad, que causan alteraciones en el proceso menstrual. Por eso, si quieres conseguirlo, te recomendamos que empieces a cuidar tu alimentación y apuestes por alimentos ricos en antioxidantes y ácido fólico. También es importante conseguir un aporte adecuado de vitaminas B, C y E, así como de zinc y de selenio, que mejoran la calidad del esperma. ¿Tus mejores aliados? Las frutas y las verduras.
Asimismo, existen suplementos destinados especialmente a mujeres que intentan quedarse embarazadas para ayudarles a preparar su cuerpo y aportarles la cantidad necesaria de ácido fólico para preparar los tejidos maternos. Te recomendamos Femibion Pronatal 1, que puede ayudar a la madre a preparar su cuerpo y tener niveles correctos de folatos¹ en la etapa previa a la concepción y en los primeros meses de embarazo. En concreto, está recomendado para mujeres a partir del momento en el que empiezan la búsqueda del embarazo hasta el final de la semana 12. Contiene ácido fólico, Metafolin®, que es una forma activa de folato "lista para usar", otras vitaminas y yodo. También tiene vitamina D, que contribuye al funcionamiento normal del sistema inmunitario y el proceso de división celular.
Es importante señalar que el cierre del tubo neural, que es el precursor del sistema nervioso central del bebé, se produce entre los días 22 y 28² , un momento en el que muchas mujeres aún no saben que están embarazadas. Por lo tanto, es muy conveniente tener niveles adecuados de folatos desde el momento en el que se planea la concepción para ayudar a prevenir problemas del tubo neural.
Otro aspecto clave en torno al ácido fólico es que 1 de cada 2 mujeres no lo metabolizan correctamente³. Es decir, el 50% de las mujeres presentan una alteración en una enzima que hace que esta pueda perder parte de su actividad y por tanto no se pueda metabolizar de forma óptima el ácido fólico. Femibion cuenta con la ventaja de tener Metafolin®, una "forma activa" de folato que no necesita ser transformado y puede utilizarse directamente por el cuerpo de la futura madre.
2. Las situaciones estresantes
El estrés, además de afectar a muchos otros aspectos de tu vida, también lo hace sobre tu fertilidad. Cuando se produce una alteración en el sistema nervioso central esto influye sobre el ciclo hormonal, que regula el sistema reproductivo. Para evitar que esto ocurra, te recomendamos que huyas de esas situaciones y te relajes siempre que puedas.
3. Dormir poco
La falta de sueño influye en el metabolismo y aumenta el estrés, por lo que puede reducir las posibilidades de concebir. Así que, procura dormir lo suficiente (entre 7 y 8 horas diarias). Establecer una hora para irte a la cama o reducir la actividad durante las horas previas, puede ayudarte a dormir mejor. Puede ser muy interesante seguir una rutina de higiene del sueño que incluya no comer al menos dos horas antes de dormir para que la digestión no afecte al sueño o de exponerse a pantallas durante un tiempo antes de dormir para que el ritmo circadiano no se vea perjudicado.
4. Fumar
Tanto en mujeres como en hombres, el consumo de tabaco reduce la fertilidad. Fumar puede provocar daños celulares, causa trastornos del ciclo menstrual y perjudica a la calidad del semen. No obstante, esos daños son reversibles si se deja de fumar, así que, ¡di adiós al tabaco!
5. Beber alcohol
Al igual que ocurre con el tabaco, el abuso del alcohol también reduce las posibilidades de tener un hijo, tanto en hombres como en mujeres. Tomar dos o tres bebidas alcohólicas al día ya afectaría negativamente a la fertilidad. ¿Lo tendrás en cuenta antes de pedir la siguiente ronda?
6. No hacer ejercicio
No hacer ejercicio suficiente, además de perjudicar a tu salud en general, también afecta a tus posibilidades de quedarte embarazada. La actividad física estimula la circulación sanguínea y disminuye el estrés y, además te aporta otros muchos beneficios, como los que puedes ver en la galería. Eso sí, te recomendamos que el ejercicio sea moderado, pues el deporte de competición, por su intensidad, puede reducir la fertilidad.
Además, no es necesario salir de casa o ir al gimnasio para mantenerse en forma. En un rinconcito del salón o de tu habitación, puedes practicar deporte sin apenas material e incluso seguir rutinas deportivas que encuentres en internet. ¡No hay excusa!
7. Utilizar lubricantes
Sí, como lo lees. Algunos lubricantes contienen sustancias que pueden alterar los espermatozoides y reducir su movilidad. ¡Asegúrate de que el producto que utilices no tenga componentes agresivos!
8. Agobiarte o presionarte para quedarte embarazada
Así es, ese afán por conseguir ser mamá puede estar provocando exactamente lo contrario. Aunque es conveniente mantener relaciones sexuales durante los días más fértiles (existen pruebas de ovulación en el mercado que pueden ayudarte), tampoco hay que perder la espontaneidad sexual. Programar de forma estricta las relaciones sexuales, obsesionarte o sentir presión, pueden provocar ese estrés que, como ya hemos mencionado, no es nada beneficioso.
¿Has tomado nota? Desde aquí te animamos a que cambies todos estos hábitos, ya que hacerlo puede ayudarte a mejorar tu salud y a conseguir ese positivo que buscas en el test de embarazo.
- 1. La ingesta suplementaria de ácido fólico incrementa el nivel de folato materno. Un nivel bajo de folato materno es un factor de riesgo en el desarrollo de defectos en el tubo neural en el feto en desarrollo. Por lo tanto, se recomienda que las mujeres tomen 400 microgramos de ácido fólico suplementario al día durante un período de al menos un mes antes de la concepción y hasta tres meses después.
- 2. McNulty B. et al. Human Reproduction, 2011, Vol. 26, Issue 6, 1, p1530–1536.
- 3. El 50% de la mujeres presentan una alteración en una enzima que hace que esta pueda perder parte de su actividad ᵃ y por tanto no se pueda metabolizar de forma óptima el ácido fólicoᵇ ᶜ ᵈ. / a) Crider KS et al. MTHFR 677C-T genotype is associated with folate and homocysteine concentrations in a large population-based, double-blind trial of folic acid supplementation. Am J Clin Nutr 2011;93(6);1365-1372. / b) Yan L et al. PLoS One 2012;7(10):e416892012. c) Kirke P.N.: BMJ 2004; 328(7455): 1535–1536. d) Christensen B et al.: Am J Med Genet. 1999 May 21;84(2):151-7.
- Los productos de la gama Femibion son complementos alimenticios y no deben utilizarse como sustitutos de una dieta variada y equilibrada y un estilo de vida saludable. No superar la dosis diaria recomendada de 1 comprimido (Femibion 1) y de 1 comprimido y 1 cápsula (Femibion 2). Mantener fuera del alcance de los niños más pequeños.
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