Si no queréis tener más hijos, podéis pensar en un método anticonceptivo irreversible. Decidir poner fin a tu fecundidad no es fácil, así que reflexiona concienzudamente antes de hacerlo. Veamos los métodos existentes…
La ligadura de trompas
Este método consiste en bloquear las trompas para que el óvulo no pueda encontrarse con el espermatozoide en el momento de las relaciones. No se quita ningún órgano y la intervención no provoca la menopausia. De hecho, los ovarios continúan produciendo las hormonas hembras. Tendrás tus reglas como siempre y la líbido y la capacidad de tener relaciones sexuales son las mismas. La operación no cambia la piel, ni los pechos, ni el peso. Dura entre 15 y 20 minutos y se realiza con anestesia general.
Pequeños inconvenientes: se requiere una hospitalización de 36 horas, quedan dos pequeñas cicatrices (al nivel del ombligo y por encima del pubis), se sienten dolores post-operatorios durante 48 horas y es necesario hacer reposo durante una semana. Pero vale la pena: el efecto es inmediato y fiable en un 99,6%.
La técnica no quirúrgica Essure®
Se trata de una nueva práctica que data de octubre de 2007: se diferencia en que no hay operación quirúrgica. Es un tratamiento ambulatorio (sin hospitalización) y permite una recuperación muy rápida de las actividades habituales. Se coloca un microimplante en las trompas por las vías naturales (vagina, cuello de útero), lo que provoca su obstrucción y, por lo tanto, la fecundación es imposible. Dos estudios clínicos, coordinados en Estados Unidos y en Europa y realizados a más de 2.000 mujeres, muestran la eficacia de este método. El éxito es del 96,3%. Las pacientes se consideran satisfechas con el procedimiento en el 95% de los casos. Por último, el 98% de ellas recomendaría esta técnica a una amiga. Atención: si eres alérgica al níquel podrías sufrir una infección genital y sangrados genitales. .
Paralelamente a estos dos métodos de contracepción definitivos, algunas operaciones pueden provocar esterilidad. Por ejemplo, la ablación del útero o de los ovarios, pero no se consideran técnicas anticonceptivas.
¿Y qué pasa con la sexualidad?
Hay que saber que la contracepción definitiva no cambia para nada el deseo, ni las sensaciones, ni el placer, ni el orgasmo. "Aunque la mujer no puede tener más hijos, el proceso hormonal no se ve alterado”, explica la doctora Caroline Dhainaut, ginecóloga-tocóloga del hospital CHU Bichat-Claude-Bernard, en París. “Conserva sus reglas, las que tenía sin contracepción". ¡Puedes retomar la actividad normal y seguir siendo mujer!
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