Por mucho que Sebastián se empeñara en demostrarle a la Sirenita que la vida bajo el mar era mucho más divertida, lo cierto es que en esta ocasión la fiesta se encontraba en mitad del Mediterráneo pero a varios pisos de altura sobre las olas. Concretamente en el crucero que, con motivo de su décimo aniversario, albergó la edición más grande de la historia de Desalia.
Más de 1400 jóvenes, entre los que se encontraban rostros tan conocidos como los de los influencers Dulceida, Trendy Taste o Gigi Vibes, y los actores Maxi Iglesias y Nicolás Coronado, y el modelo Juan Betancourt, surcaron las costas españolas durante 6 días en los que la diversión, la buena música y el buen ambiente no abandonaron ninguna de las cubiertas del barco.
Nosotras no podíamos perdernos este fiestón en alta mar, así que ni cortas ni perezosas metimos en nuestro baúl de la Piquer maletón nuestras mejores galas y nos embarcamos en esta aventura a bordo del crucero de Ron Barceló.
He de confesar que las expectativas no eran pocas, pero la experiencia estuvo más que a la altura. Actividades, fiestas temáticas (una con pedida de mano en directo y todo), monólogos y por supuesto la mejor música se convirtieron en el hilo conductor del crucero, que tenía como atractivo principal la gran noche de Desalia.
Dorian, Juan Magán y los dj's Brian Cross, Kiido y José De Mara fueron los encargados de amenizar la noche del martes, y pese a que pueda parecer atrevido mezclar una parte de electrónica, con dos partes de electrolatino y una pizca de pop indie, lo cierto es que el resultado fue un cóctel casi tan infalible como los mojitos y las piñas coladas que disfrutamos los allí presentes.
Con toda esta diversión a bordo, imaginaréis que las risas eran una constante a cualquier hora del día, pero es que además el humor estaba asegurado porque entre los pasajeros también se encontraba Ernesto Sevilla, que estaba rodando un corto con los tres guapérrimos actores (Iglesias, Coronado y Betancourt) que pronto podremos ver en salas de cine.
"Este cortometraje cuenta la experiencia de Desalia a través de dos amigas que ganan el concurso de Ron Barceló y vienen aquí dispuestas a pasárselo bien, divertirse mucho y ligar si es posible, y les ocurren una serie de aventurillas muy divertidas. A mí me llamaba la atención hacer comedia con dos chicas, porque yo siempre había hecho humor con hombres. Además me interesaba mucho que fuesen como Dos tontos muy tontos pero en mujer, que es una cosa que no he visto yo muchas veces, y creo que lo estamos consiguiendo", nos comentó el propio Ernesto.
El actor, que esta vez se ponía detrás de las cámaras para dirigir este proyecto, se mostró además muy ilusionado de poder vivir esta experiencia a bordo: "La experiencia de Desalia me está pareciendo increíble, aunque hubiera preferido venir sin trabajar".
En la comedia me siento muy a gusto y creo que con ella se pueden contar muchas cosas.
Desalia es experiencia, ganas de pasarlo en grande y en definitiva, hacer gala del lema Vive Ahora que Ron Barceló ha convertido en su himno. Y es que, si al embarcar llevábamos la maleta llena de modelitos y complementos, a la vuelta la traemos hasta arriba de complicidad, carcajadas, recuerdos imborrables y las mejores vivencias.
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