Todos los avances, principalmente, tienen como objetivo facilitarnos la vida y, en temas odontológicos no es para menos. Los brakets ya son cosa del pasado y dejan el protagonismo absoluto a la ortodoncia invisible, Invisalign. Con ella, es posible mejorar tu imagen sin los inconvenientes de los aparatos tradicionales, sin alambres ni piezas metálicas adheridas a los dientes, sin dolor y sin tener que cambiar tus hábitos cotidianos. La ortodoncia invisible, son todo ventajas. ¡Toma nota!
Son de quita y pon
Los alineadores se quitan solo para comer y para lavarse los dientes. Esto hace que Invisalign no altera nuestra dieta ni tampoco perjudica nuestra higiene oral.
La duración del tratamiento es menor
Estos tratamientos pueden ser desde los 3 meses de duración hasta los 18, todo depende del tipo de malposición dentaria. El tiempo de los tradicionales brackets metálicos es mucho mayor, durante unos dos años. La reducción del tiempo debe a que con los alineadores invisalign, el profesional puede transmitir fuerzas para mover los dientes desde infinitos puntos, gracias a que los alineadores cubren completamente la corona completa de los dientes, y no sólo una superficie de 2-3mm como los tradicionales brackets.
Nadie sabrá que llevas aparato
Gracias a que los alineadores están hechos de un plástico biocompatible y transparente, de medio milímetro de grosor. Esto proporciona una comodidad total y disimula, como si no llevaras ortodoncia.
¿Qué te parece? Si todavía necesitas un empujoncito para dar el paso, echa un vistazo a las sonrisas de las famosas y piensa que tú también podrás presumir de la tuya después del tratamiento.
Contenido elaborado en colaboración con Iván Malagón
© Sipa
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