No cabe duda que Kim Kardashian no tiene miedo de nada. Después del revuelo que ha suscitado su sesión de fotos posando desnuda para una publicación, la estrella de televisión no se cortó a la hora de ponerse un traje que rayaba con la vulgaridad. Es cierto que su vestuario suele estar compuesto por escotes infinitos y vestidos muy ajustados. Sin embargo, desde el nacimiento de su hija, North West, parecía que Kim Kardashian había hecho un esfuerzo por cambiar su estilismo, sorprendiéndonos con looks más elegantes en la alfombra roja, intentando convertirse en un icono de glamour que encandilara a los modistos. Pero no, ¡falsa alarma! Kardashian ha recuperado sus malos hábitos y defiende a capa y espada que debe predominar el atractivo sexual y no la elegancia.
¿Quién ha dicho que el látex sea sexy?
En plena promoción de su nueva fragancia, Kim Kardashian ha aterrizado esta semana en Australia. El martes, la estrella de la familia Kardashian estaba en Melbourne para presentar 'Fleur Fatale'. Por la noche, acudió al lanzamiento de su fragancia para reencontrarse con sus fans y con varios fotógrafos que esperaban expectantes. Para esta ocasión, Kardashian optó por hacer un homenaje al látex, enfundándose en un vestido elaborado por este material y de color rosa que resaltaba sus pronunciadas curvas, cual chicle de fresa. El diseño, de Atsuko Kudo, consistía en una falda tipo lápiz muy ajustada y un pronunciado escote. Si nos fijamos, podríamos entrever una faja, la prenda íntima a la que recurre muy a menudo. En cuanto a los complementos, optó por unos zapatos de color gris. Para terminar de analizar este look, cabe decir que lució una melena suelta sobre sus hombros y un labial del mismo tono que su atuendo. ¡Kardashian vuelve a la carga!
LETTER
Y además:
Kim Kardashian realiza un posado subido de tono
El trasero de Kim Kardashian revoluciona las redes sociales