La campaña publicitaria de Atelier 04, lanzada la semana pasada, ha sido objeto de críticas debido a supuestas referencias al conflicto palestino-israelí. Activistas y medios de comunicación del mundo árabe han acusado a Zara de asociar la colección con la guerra en Gaza, alegando que algunas imágenes evocan funerales musulmanes.
La firma, propiedad de Inditex, ha respondido rápidamente, aclarando que la campaña fue concebida en junio y fotografiada en septiembre, meses antes del estallido del conflicto. Sin embargo, las críticas persisten, y Zara emitió disculpas a través de sus redes sociales, eliminando las controvertidas imágenes de todas sus plataformas..
La presentación de la colección contó con una sesión de fotos única en el taller de un escultor, protagonizada por la modelo Kristen McMenamy. Las imágenes, que buscan elevar el estatus de la marca, han sido una estrategia utilizada por Zara en varias temporadas.
La fotografía que ha desatado la controversia muestra a McMenamy sosteniendo sobre sus hombros un maniquí envuelto en una sábana blanca. Algunos usuarios argumentan que la imagen se asemeja a los funerales musulmanes, una interpretación que Zara niega rotundamente. La compañía ha reafirmado que la campaña tenía como único propósito destacar prendas artesanales en un contexto artístico.
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En las redes sociales, la llamada al boicot persiste, con algunos usuarios argumentando que Zara debería haber reconsiderado la campaña dadas las circunstancias actuales. A pesar de la falta de una respuesta adicional por parte de la marca, la controversia sigue generando debate entre internautas y 'influencers'.
La polémica en torno a la colección Atelier 04 destaca la delgada línea entre la creatividad artística y la sensibilidad cultural. Mientras Zara se disculpa por cualquier ofensa no intencionada, la reacción en las redes sociales subraya la importancia de la conciencia cultural en la industria de la moda.
