Todos conocemos la importancia de consumir fruta todos los días. Los expertos en nutrición coinciden en señalar que deberíamos comer, al menos, entre 2 y 3 piezas de fruta al día. Como explica Alex Vidal, nutricionista de alimenta’t y colaborador de tuMédico.es, “la fruta es rica en micronutrientes y su consumo nos aporta fibra, muy importante para reducir el riesgo de cáncer de colon y conseguir un buen funcionamiento intestinal”.
Pero más allá de comer toda la fruta necesaria para mantener un cuerpo sano, también es muy importante consumir fruta de temporada. “Consumiendo fruta de temporada nos aseguramos elegir las frutas con mejores propiedades y condiciones en cada época del año”, comenta el experto.
Una fruta excelente para consumir durante el invierno y principios de primavera son las fresas. Aunque hace unos años las fresas marcaban el inicio de la temporada de calor, ahora ya podemos encontrar algunas de sus variedades en los mercados mucho antes. Las fresas son una fruta que pertenece a la familia de las rosáceas y su distintivo más característico es el color rojo.
Los 10 beneficios que te ofrecen las fresas
1. Mejora el funcionamiento del sistema inmunitario
Una sola porción de fresas puede llegar a ofrecerte casi el 150% de las necesidades diarias de vitamina C. Las fresas tienen cerca de 60 mg de vitamina C por cada 100 gramos. Este componente es esencial para ayudar al cuerpo a combatir enfermedades e infecciones, desde la gripe hasta el resfriado común.
2. Baja la presión arterial
Las fresas son una excelente fuente de potasio, capaz de contrarrestar los efectos del sodio en el cuerpo y reduciendo la presión arterial. Una dieta rica en potasio ayuda a combatir la hipertensión y las enfermedades cardiovasculares, relacionadas con el aumento del riesgo de mortalidad.
3. Ayuda con los síntomas de la artritis
Los radicales libres contribuyen al deterioro de los tejidos y músculos del cuerpo, además de a la inflamación. El resultado: las articulaciones no trabajan como deberían y pueden llegar a acumular toxinas dañinas. Los antioxidantes, presentes en frutas como las fresas, ayudan a reducir la inflamación, previniento enfermedades como la artritis o la gota.
4. Sirve de preventivo contra el cáncer
En agosto de 2019 la revista Nature Communications publicó un estudio de la Universidad Edith Cowan en el que, durante 23 años, evaluaron las dietas de 53.048 daneses. El resultado: las personas que consumían habitualmente cantidades moderadas de alimentos ricos en flavonoides, como las fresas, tenían menos probabilidades de morir de cáncer o enfermedad cardiaca. Los flavonoides, como las antocianinas, la quercetina y el kaempferol, actúan como una línea defensiva contra el desarrollo de cáncer y tumores.
5. Cuida la salud de tu visión
La presencia de flavonoides, ácido elágico y fitoquímicos fenólicos en las fresas reduce el riesgo de problemas de visión relacionados con la edad, como la degeneración macular. Estos compuestos antioxidantes eliminan y atrapan los radicales libres, evitando que dañen las estructuras oculares.
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6. Regula el azúcar en sangre
Las fresas tienen un índice glucémico relativamente bajo, lo que significa que no causan picos extremos en el azúcar en la sangre después de su consumo. Las fresas también pueden reducir el riesgo de diabetes o mejorar sus síntomas existentes, ya que forman parte de una dieta equilibrada.
7. Disminuye el riesgo de derrame cerebral
La abundante presencia de antioxidante en las fresas ofrece también protección contra los accidentes cerebrovasculares. Esto se debe, principalmente, a la prevención de la formación de coágulos sanguíneos. Además, el potasio hace que las fresas actúen como un vasodilatador que mejora el riego sanguíneo en el cerebro, reduciendo las probabilidades de estos percances.
8. Ayuda a mejorar nuestro humor
Los frutos rojos, como las fresas, también benefician nuestro funcionamiento emocional y mental. Las pequeñas semillas de las fresas contienen ácido graso omega-3 ácido alfa-linolénico, lo que ha demostrado mejorar el estado de ánimo. Pueden llegar a ser comparables a los efectos estabilizadores del humor del ácido valproico comúnmente recetado.
9. Alivia los síntomas de la alergia
Sí, aunque resulte difícil de creer, las fresas también pueden ayudarnos con la alergia primaveral. Los beneficios antiinflamatorios y el refuerzo inmunológico que ofrecen los flavonoides, concretamente la fisetina, ayudan a las células inmunes del cuerpo a controlar las reacciones inflamatorias a los alérgenos.
10. Promueve la vitalidad de la piel
El cuerpo usa la vitamina C, presente en frutas como las fresas, para la producción de colágeno. Esta proteína es esencial para la salud de la puel, ya que ayuda a que permanezca suave y elástica, al tiempo que repara las células dañadas de la piel. Además, la vitamina C sirve como un eliminador de radicales libres, luchando contra el desarrollo del cáncer de piel y el envejecimiento prematuro.
Las fresas se incluyen dentro de los alimentos que puedes comer a diario porque apenas tienen calorías, y son ideales para empezar una dieta. ¿Quieres conocer más alimentos bajos en calorías? No te pierdas nuestra lista de 50 alimentos con menos de 50 calorías.
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Artículo elaborado en colaboración con tuMédico.es
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