Probablemente muchos días te sientas inflamada, fatigada e hinchada y no sepas por qué. Normalmente nuestra reacción es dejarlo pasar convenciéndonos de que es debido al estrés, la ansiedad o a la regla si estamos en los días previos. Grave error.
Si te sientes así, es que tu cuerpo se ha puesto en modo alerta y nos está diciendo que algo está fallando. El sistema inmune se defiende con esta reacción física que tanto nos incomoda pero podemos controlarla mediante una dieta antiinflamatoria.
Este tipo de dietas nos permiten depurar y eliminar toxinas para reducir el hinchazón. Si consigues mantener la dieta antiinflamatoria en el largo plazo, tendrás multitud de beneficios:
- Reducirás el riesgo de muerte: incluido el cáncer, diabetes, hipertensión y enfermedades cardiovasculares.
- Reducirás el riesgo de enfermedades crónicas y degenerativas.
- Retrasarás el envejecimiento.
- Mejorarás tu calidad de vida si eres fumadora. Estudios estadísticos afirman que mejora la calidad de vida si mantienes una dieta antiinflamatoria. Son las que más se benefician de este tipo de dietas porque reducen el riesgo de mortalidad en más de un 30%.
Antes de recomendarte los alimentos que debes incluir en tu dieta, te damos algunas claves para seguir esta dieta:
- Ve rotando los alimentos con las mismas propiedades. Si le das al cuerpo el mismo alimento siempre, lo acabarás saturando y tendrás más riesgo en volver a caer en una dieta no saludable.
- Toma probióticos: cuida tu flora intestinal dotándola de bacterias beneficiosas para nuestro tránsito. Puedes tomarlos con suplementos nutricionales, kéfir, kombucha u otros alimentos fermentados.
- Toma infusiones todos los días. Infusiones como el té verde tienen muchos antioxidantes y tiene un gran efecto antiinflamatorio.
- Un vaso de agua con zumo de limón en ayunas ayuda a purificar el organismo.
- Elimina de tu dieta los azúcares refinados, harina blanca, sal refinada, los procesados.
- Disminuye el consumo de embutidos y carne roja.
- Haz ejercicios de fuerza, no sólo cardio.
- Adelanta tu hora de cenar: es importante que tu organismo descanse 10 o 12 horas para que las bacterias intestinales se regeneren. Es lo que se llama “ayuno nocturno”.
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Alimentos antiinflamatorios
Frutos rojos: tienen multitud de antioxidantes y compuestos antiinflamatorios como los caninos y antocianos
Harinas: las harinas con gran aporte de fibra ayudan a reducir al inflamación en la sangre
Matcha: contiene un compuesto llamado galato de epigalocatequina-3 que ayuda a reducir la inflamación.
Nueces: contienen grasa poliinsaturada, que ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares
Granadas: contienen propiedades antisépticas y antiinflamatorias. Además de ser rica en magnesio, fósforo y hierro
Verduras verdes: el brócoli, la coliflor, las coles de Bruselas y la col son ricas en fibra y fitoquímicos esenciales, como los glucosinolatos.
Pescados grasos: el salmón, el atún y las sardinas son ricos en ácidos grasos como omega 3 que combaten la inflamación
Aceite de oliva: se asocia con un menor riesgo de enfermedades cardíacas, cáncer y enfermedades articulares y neurológicas
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