El metabolismo está íntimamente ligado al peso corporal y es el proceso por el que nuestro cuerpo transforma los alimentos en energía. Como cada cuerpo es diferente, este proceso afecta de manera diferente según la persona. Hay muchas que pueden comer mucho sin que su cuerpo se transforme y hay otras que por poquito que coman, ya lo notan en la báscula. En el primer caso estaríamos ante un caso de “metabolismo rápido” y, en el segundo, de “metabolismo lento”.
Sea como sea tu metabolismo, hay muchos mitos entorno a esto. Todas hemos escuchado alguna vez: “tomar un vaso de agua con limón es bueno”, “las calorías líquidas no influyen”, “los productos light son buenos para adelgazar”, “si comes mucha fruta no puedes perder peso”. Vamos a bucear un poco sobre estos mitos que tanta controversia generan y os vamos a contar si son o no verdades como puños:
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- Las personas atléticas tienen un metabolismo mucho más rápido. MITO: en lugar de depender del tamaño del cuerpo, el metabolismo depende de la masa proteica
- El metabolismo es genética. MITO: Aunque los genes influyen en el metabolismo, el estilo de vida y lo que comemos también influyen. Cuando más ejercicio hagas y más saludable sea tu dieta, más favorecerás a este proceso.
- Tener un metabolismo lento está asociado a un aumento de peso. VERDAD: Si su metabolismo es lento, gasta menos energías y tiende a engordar con mucha más rapidez. Algunos alimentos como los lácteos, cereales integrales, las lentejas o el té ayudan a acelerar el metabolismo.
- Se queman más calorías al tener un metabolismo más rápido. MITO: aunque tengas un metabolismo más rápido esto no significa que no aumentes de peso. Aumentarás más lento pero aumentarás.
- Los alimentos picantes aceleran nuestro metabolismo. VERDAD: las especias aumentan la producción de calor en nuestro cuerpo y conducen a una mayor quema de calorías. Pero no nos equivoquemos, mucho picante sin nada de ejercicio ni dieta sana poco ayudará a la pérdida peso.
- Es mejor repartir las comidas en pequeñas cantidades a lo largo del dia. MITO. Normalmente no distribuimos bien las comidas en pequeñas raciones, lo que comamos luego en más cantidades y con más ansias. La idea de esto es evitar el efecto “hambre” en el cuerpo pero no estamos seguras de que así sea. Si bien es cierto que hay defensores y detractores de este método, deciros que esto no está científicamente respaldado. Así que preocuparos más en qué coméis que en el número de veces.
- El metabolismo se va ralentizando con la edad. VERDAD: el estilo de vida que lleves afectará de manera positiva (o negativa) a tu metabolismo a medida que vayas envejeciendo.
