¿Has visto alguna vez una boda desde los ojos de una novia? Gracias Liisa Lut, una fotógrafa Estonia, ahora es posible. Esta novia quería celebrar su boda en familia, sin el estrés que puede generar organizar una súper fiesta, saludar a muchas personas y posar ante los fotógrafos. Para ella y su marido lo esencial era la familia más cercana y ellos dos.
Liisa se despertó a las 7:29, salió a correr, desayunó, se duchó y comenzó a prepararse junto a su futuro marido. Las fotos muestran todos los detalles que le llamaron la atención a la novia durante ese día. ¿No os parece interesante?
"Simplemente hice fotos aquí y allá, del modo más sincero y honesto en que me fue posible", relata. "No hubo un plan ni montaje de ningún tipo, así que no fue nada incómodo ni acaparó más atención que el propio día en sí".
Luts llevó con ella una cámara Fujifilm X-T10, de este modo podría capturar todo lo que le emocionaba o llamaba su atención. Unas fotos únicas que expresan la emoción de un momento tan especial.
¿Te atreverías a seguir sus pasos?
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