El frío ya está aquí y con él han llegado las tendencias de decoración para la época más lluviosa y casera del año. En esta temporada es habitual que pasemos mucho tiempo en nuestra casa, por lo que dar un nuevo aire a algunos muebles y accesorios siempre es un plus para evitar la monotonía y el cansancio y llenarnos de vitalidad. Si, de paso, estamos a la última en lo que a moda para el hogar se refiere, mejor que mejor.
El nuevo ciclo decorativo ha venido cargado de novedades que se suman a los estilos y textiles ya establecidos. Los colores tierra y mint, los cojines rectangulares para el sofá o la cama, el mobiliario con formas redondas, las geometrías en textiles o la reafirmación del velvet como un must en cualquier espacio, son algunos de los indispensables para este otoño-invierno.
“Muchas de las tendencias se mantienen temporada tras temporada o reaparecen después de un tiempo”, señala la diseñadora e interiorista Sandra Marcos. “No se trata de redecorar la casa entera cada año porque seguro que una parte de lo que ya tenemos encaja dentro de las novedades. Es, más bien, seleccionar alguna de estas tendencias para incorporar nuevos detalles en el mobiliario o en los accesorios de las estancias y así darles ese aire diferente y actual”, añade.
Los colores de moda: del dorado al mint
El otoño se caracteriza por los colores de los árboles, una gama de amarillos y marrones que va cambiando según pasan las semanas en la estación. El invierno, por su parte, tiende más a estar ligado a colores más fríos, como pueden ser los azules o los verdes. La decoración para la nueva temporada no es ajena a estas paletas y las tendencias están plagadas de tonos tierra (desde el amarillo al siena, pasando por los dorados) y mint con detalles en azul, negro, rojo vino o rosas pastel.
Estos colores de moda se pueden aplicar a cualquier estilo y objeto, ya sea un cojín, una copa decorativa, plaids, lámparas o papeles estampados para las paredes. Son, además, colores fáciles de combinar en un entorno blanco con elementos de madera y te permiten jugar con el contraste e incluso impregnar de luz la estancia (en este último caso, esto lo conseguirás con los tonos tierra o rosas pastel).
© Sandra Marcos
Formas redondeadas en muebles y accesorios
Las redondeces son formas que generan emociones agradables y positivas para quien las observa. Círculos, curvas, óvalos… Estos u otros diseños del estilo evocan tranquilidad, comodidad, suavidad e incluso felicidad, todos ellos sentimientos que conviene reforzar en una época en la que hay menos horas de sol, el estrés del trabajo hace mella en nosotros y el ambiente exterior es más triste por los cielos grises y las lluvias.
Por este motivo, las tendencias decorativas para este otoño-invierno incorporan estas formas en el mobiliario o accesorios. Sandra Marcos recomienda aprovechar esta tendencia para probar con algo diferente, por eso propone opciones como su sofá azul de ante y patas doradas. En caso de que no busques algo tan arriesgado, también puedes confiar en las redondeces de las lámparas o los espejos, entre otras.
© Sandra Marcos
Cojines alargados para sofás o camas
Los cojines rectangulares son la estrella para dar un nuevo aire a cualquier estancia. Este tipo de accesorios son un complemento ideal para el sofá o butaca, para un banco o descalzadora y para colocar en el cabecero de la cama, especialmente si se utilizan varios para dar volumen a la decoración.
Con los colores de temporada, acertarás seguro y, si son planos y de tamaño medio, mucho mejor, ya que estas medidas te permitirán combinarlos mejor entre sí y que no abulten en exceso.
© Sandra Marcos
La porcelana manda en accesorios
Los jarrones o recipientes de porcelana no solo dan un toque de elegancia a las estanterías, vitrinas o mesas en los que se colocan, sino que también emanan un aura de delicadeza y luz gracias a su color blanco y a su fino tacto y suavidad.
En esta temporada, lo que está de moda es la porcelana de diseño holandés con motivos florales. Combina varios jarrones de diferentes tamaños o formas entre sí para crear composiciones únicas que encajen a la perfección en cualquier rincón que tengas libre.
© Sandra Marcos
El estilo raw sigue siendo un must
El estilo ‘raw’ está en pleno auge. Materiales en bruto, sencillez y nada de sobrecarga decorativa son los tres aspectos fundamentales de esta tendencia que, una temporada más, se mantiene como un indispensable en cualquier vivienda.
Madera sin tratar, con imperfecciones a la vista (grietas, vetas, desigualdades…), fibras naturales (lino, lana, algodón, etc.), terracota y, sobre todo, objetos realizados de forma artesanal son algunos de los aspectos que deben estar presentes en los elementos decorativos.
© Sandra Marcos
Geometría, una apuesta segura
La geometría en decoración no es algo que haya aparecido este año de la nada, sino que, en los últimos tiempos, ha ido cobrando más y más importancia. Emplear composiciones con estas formas en la vivienda sirve para romper con la monotonía de lo liso y lo uniforme, para impregnar el ambiente de creatividad y que las paredes, tapizados o suelos brillen por su versatilidad.
Estampados geométricos en los cojines, espejos compuestos de diferentes piezas, o alfombras con estos motivos son algunas de las piezas geométricas más habituales, pero la geometría también puede incorporarse a pantallas de lámparas o mesitas auxiliares, entre otras opciones.
© Sandra Marcos
Velvet, el eterno favorito
El velvet, un año más, es un must para este otoño-invierno, ya que aporta calidez a cualquier ambiente y, gracias a su versatilidad a la hora de combinar con otros tejidos y materiales, permite renovar un espacio sin necesidad de cambiar todo el mobiliario.
Puedes utilizarlo en cualquier tipo de superficie o accesorio, desde un tapizado de una silla o sofá hasta el exterior de un cojín, pasando por almohadones u otros complementos decorativos.
© Sandra Marcos
Artículo elaborado en colaboración con Sandra Marcos
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