Cuando nos sentamos en la sala de cine para ver Verano 1993 ya preveíamos un buen desenlace de este encuentro cinematográfico. La opera prima de Carla Simón nos conquistó desde el primer minuto por la intensidad de su historia y esa forma de removernos con cada plano y cada diálogo. Nos enamoramos de la mirada y de esa rebeldía llena de ira de Frida, magistralmente interpretada por la pequeña Laia Artigas. También nos conquistaron David Verdaguer y Bruna Cusí, espléndidos en sus papeles.
Pues bien, hoy hemos sabido que ha sido la película elegida por los miembros de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas para representar a nuestro país en la edición número 90 de los grandes premios del cine. Una decisión con la que no podemos estar más de acuerdo.
Y es que esta historia, que narra la propia infancia de la directora, quien perdió a sus padres con solo 6 años debido al SIDA, es más que recomendable. La perspectiva de esa pequeña que se ve obligada a vivir una nueva vida con una nueva familia en un lejano verano de 1993 hace que el espectador se sienta parte de esa pequeña Carla que ahora es Frida.
Además de este reciente éxito, la cinta de Carla Simón ya fue galardonada como mejor Ópera Prima en el Festival Internacional de Cine de Berlín, obtuvo la Biznaga de Oro a la mejor película en el Festival de Málaga y fue reconocida también en Cannes.
Desde nuestro punto de vista, reconocimientos más que merecidos a una película brillante que, esperemos consigue llegar a esa alfombra roja estadounidense.
Por el momento y hasta que llegue el próximo 4 de marzo, te dejamos algunas otras obras maestras de nuestro cine:
© La novia
¡Disfruta de este clip en exclusiva!
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