Gabo, como le conocían, es considerado uno de los autores más significativos del siglo XX por su trayectoria como novelista, escritor de cuentos, guionista y periodista. El mayor reconocimiento de su carrera llegó en 1982 cuando fue galardonado con el Premio Nobel de Literatura. Según la laudatoria de la Academia Sueca "por sus novelas e historias cortas, en las que la fantasía y la realidad se combinan en un tranquilo mundo de imaginación rica, reflejando la vida y los conflictos de un continente".
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García Márquez fue hospitalizado el pasado 31 de marzo por un proceso de infección pulmonar en las vías urinarias y tras ser dado de alta el 8 de abril, la familia decidió que convaleciese en su casa de Ciudad México para preservar su intimidad. Finalmente, y tras informaciones algo contradictorias sobre su posible mejoría, el escritor fallecía este 17 de abril en México D.F.
"Lo único que me duele de morir es que no sea de amor"
Gabriel García Márquez se ha marchado pero nos deja para siempre frases inolvidables como esa repartidas en su amplia bibliografía. Publicó su primera novela en 1954, La Hojarasca, que ya apuntaba los rasgos más característicos del estilo literario del colombiano, la fantasía. Posteriormente, escribió Relatos de un naúfrago (1955) y El coronel no tiene quien le escriba (1961), recibiendo cuatro años después el Premio Nacional de Literatura de Colombia, su primer galardón. Sin embargo, se consagró como un referente de la literatura en 1967 cuando publicó en Argentina Cien años de soledad, una de las novelas más importantes de la literatura universal que mezcla elementos realistas y fantasiosos, de ahí que se le considere el padre del realismo mágico.
Una vez consagrado como escritor se instaló en Barcelona, donde vivió durante siete años, siendo decisiva su estancia allí para lo que se conoció como el boom de la literatura hispanoamericana, de la que él mismo es uno de sus mayores representantes. Después escribió obras relevantes como El otoño del patriarca, la que calificó como su preferida, Crónica de una muerte anunciada, El amor en los tiempos del cólera o Noticia de un secuestro.
"Así es -suspiró el coronel-, la vida es la cosa mejor que se ha inventado", escribía Gabriel García Márquez en su obra El coronel no tiene quien le escriba. Hoy, Gabo deja la vida, esa vida que tanto amaba, pero el trabajo de este gran referente de la literatura nos quedará para siempre. Descanse en paz.
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