Según los estudios de Elizabeth Arden, las chicas de veinte y treinta años son la generación más estresada. ¡Y no nos cuesta creerlo! Trabajar hasta tarde, decir que sí a todo por no sentirnos culpables… ¡Nos asusta vivir la vida sin pensar en las consecuencias!
Todo el mundo se estresa a veces, pero no debería ser algo que nos tomáramos a la ligera. El estrés crónico puede conducir a problemas de salud e incluso a la depresión. Así que, para mantener el estrés a raya, te dejamos con los 18 hábitos que todas las chicas que estén en su veintena o en su treintena deberían seguir para disfrutar más de la vida y tener menos tensión.
1. Rodéate de belleza...
... fuera de casa. Si sientes que el estrés llama a tu puerta, no te sientes a esperarlo. Hacer algo tan simple como dar un paseo, preferiblemente en un parque o cerca de agua (como en un río o un lago) puede ayudarte a calmarte, especialmente si eres una persona visual. Esas vistas tan bonitas y el aire fresco harán que te sientas mucho mejor en muy poco tiempo.
2. ¡Mejora tu ritmo cardíaco!
¡El ejercicio hace feliz! Bien sea con el running, en clases de HIIT (entrenamiento en intervalos de alta intensidad) o bailando en Zumba, disminuir el nivel de estrés a través de entrenamiento cardiovascular es súper efectivo, tanto física como mentalmente.
Rebecca Fredericks, life coach y experta en bienestar, dice: “Los estudios muestran repetidamente que el ejercicio aeróbico (la clase de ejercicio que utiliza el oxígeno para alimentar los músculos, como el running, el remo, el cross training o el ciclismo) ayuda a disminuir los niveles de colesterol, así como a mejorar tu estado de ánimo a través de la liberación de endorfinas – que aportan una sensación de bienestar al cerebro.
3. Practica yoga
Todo el mundo sabe que el yoga es ideal para aliviar el estrés, ¿pero te has preguntado por qué? El yoga trabaja cuerpo y mente a través de ejercicios de respiración, posturas apacibles y meditación. Incluso, puedes hacerlo más relajado escuchando música y con aromaterapia, que también despeja la mente y mejora el estado de ánimo.
Y aunque solo puedas ir a clase una vez por semana, una vez que aprecies los beneficios del yoga, ¡pronto serás adicta!
4. Ríete
Dicen que reírse es la mejor medicina, ¡y es verdad! Las investigaciones han demostrado que aquellos que usan el humor para hacer frente a situaciones estresantes tienen una mejor condición física que aquellos que se toman las cosas demasiado en serio. La risa activa y alivia el estrés y ayuda a los órganos a funcionar mejor, a que la sangre fluya, alivia la tensión y te hace sentir más relajada. Es como estirarse: cuando te estiras, los músculos se tensan y luego se sueltan, dejándote más relajada. ¡No hay nada mejor que reírse despreocupadamente!
5. Respira, respira
Cuando estás estresada y nerviosa, la respiración tiende a acelerarse, lo que puede afectar a la manera en la que tu cuerpo responde a las situaciones de mucha presión. Pero no te preocupes, ¡puedes mejorar los problemas de respiración! Según los estudios, respirar profundamente ayuda a devolverle la relajación a tu cuerpo. ¡Pruébalo! ¡Hay algunos ejercicios muy simples! No te arrepentirás.
6. Mima tu piel
Tu piel refleja lo que te ocurre por dentro y por fuera. Los problemas como el acné, los eczemas, la soriasis y el herpes labial son síntomas comunes de estrés, así que no te extrañe que tu piel sufra muchos periodos de tensión.
El estrés también puede hacer que tu piel luzca más envejecida, provocando que tengas la tez apagada, arrugas prematuras o un tono desigualado, así que si quieres tener una cosa menos de la que preocuparte, asegúrate de tener una rutina facial que te proteja contra las adversidades de la vida. La colección Flawless Future de Elizabeth Arden, desarrollada con la tecnología Ceramide, es el perfecto punto de partida. Su Caplet Serum, Eye Gel y Moisture Cream SPF30 cuidarán de tu piel de la mañana a la noche, ya que trabajan con nutrientes ricos en sales minerales, que te darán el cuidado que necesitas.
7. Besa mucho
¿A quién no le gusta un buen beso? Nos hace sentir bien, quemamos unas cuantas calorías y nos hace sentirnos queridos. Esto es porque al besar, aumentamos las endorfinas (la hormona feliz de la que hablábamos antes), mejorando nuestro estado de ánimo y haciéndonos más felices. La oxitocina, conocida como “la hormona del amor”, también aumenta cuando damos besos, generando un sentimiento de calma, reduciendo nuestras hormonas de estrés y haciéndonos sentir completos. Además, ¡los besos apasionados reducen la tensión!
8. ¡Ponte juguetona!
¿Estás satisfecha con lo que ocurre en tu cama? Mejor que lo estés, ya que el sexo también es conocido por ayudar a mejorar el estado de ánimo y acabar con el estrés. Y no solo te hace sentir mejor, sino que podrás enfrentarte mejor a tus problemas. Hay estudios que demuestran que la gente que practica sexo más a menudo maneja mejor las situaciones estresantes.
9. Presta más atención a lo que comes
¿Eres de las que come para animarse? ¿Qué comidas asocias con el estrés? A nosotras nos viene a la cabeza el chocolate y esto es porque muchas de nosotras recurrimos a ciertos alimentos para consolarnos cuando estamos estresadas o deprimidas. Pero aunque hagan que nos sintamos mejor temporalmente, probablemente te arrepientas después.
Rebeca nos cuenta: “La comida y el alcohol son dos de las cosas a las que más recurrimos para mejorar nuestro estado de ánimo. Sin embargo, si de verdad pensáramos en la comida que estamos comiendo, masticando despacio, experimentando todas las texturas y los sabores de cada bocado, seleccionaríamos comidas más saludables, nos llenaríamos antes, consumiríamos menos y disfrutaríamos más de la comida”.
Intenta escribir un diario con lo que has comido cada día y cómo te hace sentir. Esto ayudará a saber lo que comes y con cuales te estás pasando. ¡Problema resuelto!
10. Duerme la siesta
¡La siesta es beneficiosa! Pero no estamos hablando de tres o cuatro horas perdidas durmiendo, sino de una cabezada de 20 minutos. Hay investigaciones que han probado que las siestas nos ayudan a sentirnos más frescas y preparadas para afrontar el resto del día.
Según estas investigaciones, dormir la siesta con regularidad puede ayudar a reducir el estrés y el riesgo de sufrir enfermedades de corazón.
11. Date un masaje
No hay nada que ayude más a hacer desaparecer el estrés que un buen masaje. ¡Y es todavía más efectivo si es con aromaterapia! Los aceites esenciales reducen el estrés, despiertan tus sentidos, mejoran el humor y te hacen sentir como nueva.
12. Acaricia a tu mascota
¿Cuántas veces te has parado a acariciar a un perro? Está científicamente probado que tener un perro o un gato puede disminuir el estrés. Además, te animan a hacer deporte y son una forma perfecta de socializar. ¡Hay muchas buenas razones para tener una mascota!
13. Enciende una vela
Nunca subestimes el poder desestresante de una vela. Y es que no solo huelen de maravilla y son preciosas, sino que son muy buenas para eliminar las tensiones. Las velas perfumadas suelen llevar aceites esenciales, que funcionan como una forma de aromaterapia y dan paz y tranquilidad. ¡Prueba la lavanda, vainilla o el limón!
14. Relájate, date un baño
Relájate y date un baño caliente. Si has acumulado muchas tensiones, ¡haz lo mismo que hacían los romanos! No hay nada mejor que un buen baño caliente al final del día. La presión del agua y el calor ayudan a los órganos a relajarse, alivian el dolor y relajan la mente.
14. Organízate
No es de extrañar que aquellos que tienen menos estrés son los que mejor organizados están. Hacer una lista con las cosas pendientes es una gran manera de empezar o terminar el día, pues sabrás exactamente lo que tienes que hacer.
15. Cuelga un carrillón de viento
¿Alguna vez has estado en casa de alguien y has oído su carrillón de viento sonar? ¡Te sorprenderías de cuánto pueden ayudar! Los sonidos relajantes calman y reducen la tensión y aportan un sentimiento de calma y relajación. ¿Ya te has comprado uno?
16. Llama a tus amigos
Cuando entres en pánico porque tienes una fecha de entrega o un montón de cosas que hacer en casa, tómate un momento para ver la situación desde fuera llamando a un buen amigo o a un familiar que te diga con sinceridad su opinión. Siempre ayuda compartir el problema con otra persona y hablar con alguien compresivo te hará ver la situación desde otro punto de vista.
17. Mira los problemas con perspectiva
Cuando estás muy agobiada porque tienes que hacer veinte cosas a la vez, es muy fácil dejarse atrapar por el estrés, pero si empiezas a perder el control, tienes que intentar verlo desde otra perspectiva. Si se te quema la cena, te has olvidado de devolverle la llamada a un amigo, te has olvidado de tu clase de yoga y tienes una fecha de entrega pisándote los talones, intenta priorizar y darte cuenta de que esos pequeños problemas no son el fin del mundo. Mañana será otro día.
18. Sé positiva
¿Tienes un gran proyecto entre manos pero no estás segura de si podrás con ello? ¿Estás a punto de ir a una entrevista y te da miedo meter la pata? Relájate, ya que cuanto más estresada estés, peor hablarás de ti misma. Lo mejor que puedes hacer es tomar el control de tus pensamientos y cambiar tu manera de pensar. Prueba escribiendo un diario con todo lo que te gusta y todo lo que has conseguido hasta ahora en la vida. No importa si es grande o pequeño, todo cuenta. ¡La positividad empieza dentro de ti!
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