Las albóndigas en salsa son una receta que hemos visto en nuestras casas desde que somos pequeños. Ahora cuando regresas a casa y te ponen un plato de albóndigas, seguro que se te hace la boca agua, y más si son las de la abuela.Y es que las recetas de la abuela tiene un toque especial, y un sabor único. Pero tu también podrás conseguir esa intensidad en las albóndigas con esta receta tan deliciosa que te dejamos a continuación. ¡Hora de cocinar!
Las albóndigas proceden de la comida árabe, quienes trajeron esta deliciosa receta a países europeos. Sus ingredientes son muy sencillos y fáciles de conseguir. La receta tradicional y que hoy seguimos elaborando contiene carne y especias. Con esta mezcla se forman bolas redondas que se hacen ya sea al horno o en el sartén. Muchas de las albóndigas se combinan con una salsa rica y sabrosa en las que no te podrás resistir a mojar el pan.
Receta de albóndigas paso a paso
Ingredientes:
- 1 huevo
- 150 ml de leche
- 1 rebanada de pan de molde
- 2 dientes de ajo
- 500 gr de carne picada
- 170 gr patatas
- 100 gr cebolla
- Aceite de oliva virgen extra
- 30 gr de harina
- 300 ml de caldo de carne
- Sal al gusto
Modo de preparación En un recipiente amplio añade la leche con los huevos. Añade a esta mezcla una rebanada de pan de molde y vete aplastando con un tenedor hasta que tenga una buena consistencia. Mezcla muy bien hasta que quede bien integrada. Luego, incorpora los dientes de ajo y la sal al gusto. Posteriormente, pela bien la patata y rállala, y resérvala. Una vez lo tengas listo incorpora a la mezcla la carne picada y la patata rallada, y mezcla. Debes mezclar bien hasta que quede bien homogénea. Saca otro cuenco e incorpora en él bastante harina. Vete cogiendo la mezcla de la carne picada que ya has elaborado y vete haciendo bolitas e incorporándolas a la mezcla de harina. Si quieres ir haciéndolas de forma más rápida solo tienes que añadir unas cuantas al plato de harina y hacer movimientos giratorios hasta que las albóndigas queden bien enharinadas. Por último, calienta aceite de oliva virgen extra en una sartén y frie las albóndigas. Deja que se doren bien al menos durante unos minutos. Luego sácalas y quita el exceso de aceite y resérvalas hasta hacer la salsa.
Cómo hacer la salsa de la abuela paso a paso
Con esta salsa de la abuela tan tradicional y rica, no pararás de mojar pan. Te traemos dos versiones para que puedas elegir y sorprender a tus invitados, o a toda la familia.
Para esta salsa solo necesitarás trocear bien los dientes de ajo y la cebolla. Una vez que queden bien pochados en la sartén debes incorporar harina. Es importante que vayas removiendo bien para que no se pegue y tampoco se queme la harina. Una vez que haya cogido color añade y la salsa se haya ido espesando añade las albóndigas. Coloca la cazuela de nuevo al fuego y déjalo cocer durante unos 2 minutos a tiempo suave.
Salsa de tomate para albóndigas
Ingredientes para la salsa:
- 1 kg de tomates
- 1 cebolla
- 1/2 pimiento verde
- 2 dientes de ajo
- 1 cucharada de albahaca
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
Lo primero es picar el ajo en trozos pequeños, corta también la cebolla, y el pimiento verde. Por último, trocea los tomates. Es importante que según quieras la textura los piques. Por ejemplo, si deseas una textura mucho más espesa agrégalos enteros, aunque luego eso sí tendrás que cocinarlos. Si por el contrario quieres una salsa más ligera es mejor que los trocees muy pequeños para que puedas conseguir una textura más agradable. A la hora de hacer el sofrito primero incorpora el pimiento y la cebolla. Es importante que cocines esta mezcla a fuego medio para que quede bien caramelizada la mezcla. Mientras tanto bate los tomates triturados, y luego añádelos al sofrito en la sartén. Cocina la mezcla a fuego lento, y sin poner la tapa durante al menos unos 45 minutos. Antes de que esté lista la salsa incorpora albahaca y orégano, y cocina durante unos minutos más.
LETTER
Además:
¡Una tentación irresistible! 8 salsas para chuparte los dedos
¿Cómo hacer salsa tártara? Las recetas más sabrosas y cremosas
La lasaña, esa tentación italiana en la que queremos caer