El verano es sol, bikini y... ¡Helados! No hay nada más refrescante que un postre frío cuando suben las temperaturas. Además, ahora con las sorbeteras hacer helados en casa se ha convertido en un juego de niños. ¿Quieres volver a comer un helado de vainilla con todo su sabor? O quizás, prefieres improvisar nuevos sabores imitando a las grandes marcas y elabores un helado con cookies... ¡Delicioso! Elijas la receta que elijas, aquí tienes todos nuestros consejos para triunfar con tus helados caseros.
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La sorbetera, el arma imprescindible
En primer lugar, ¿qué es una sorbetera? Se trata de un utensilio compuesto por un recipiente y una turbina que permite descender la temperatura de cualquier preparado, evitando la formación de hielo. Así pues, solo hay que preparar la mezcla, introducirla en la sorbetera y obtendremos en menos de una hora nuestros helados. Existen tres tipos de sorbeteras con sistemas de refrigeración más o menos sofisticados:
- Sorbetera simple: Está formada por una turbina y un recipiente. Debe colocarse en contacto directo con la pared del congelador.
- Sorbetera por acumulación: Funciona con un disco frío que se coloca en la parte delantera del congelador: Cuando el disco está congelado (entre 18 y 24 horas), se sitúa en el fondo de la sorbetera. El frío se extiende cuando la turbina se pone en funcionamiento.
- Sorbetera autónoma: Dispone de su propio sistema de refrigeración.
Elegir uno u otro tipo de sorbetera dependerá sobre todo de la cantidad de helado que quieras preparar y de la frecuencia con la que elaborarás estos postres. Por otro lado, también podemos preparar helados sin sorbetera pero con el inconveniente de que tardarás más y tendrás que tratar la mezcla varias veces manualmente. En el caso de que prefieras esta fórmula, tendrás que colocar el preparado en el congelador y mezclarlo al cabo de una hora con el batidor manual o la batidora eléctrica. Vuelve a dejarla en el congelador y repite este proceso cada hora y media aproximadamente hasta obtener un helado cuya textura no contenga trozos de hielo.
Las recetas básicas
Te vamos a enseñar ahora cuáles son las recetas básicas que puedes preparar para que después seas tú quien improvise sobre estas recetas básicas y sorprendas a todos.
En primer lugar, la crema helada
Ingredientes (para 4 personas)
- 250 g de crema entera
- 250 cl de leche
- 100 g de azúcar
Para empezar, llevamos a ebullición la leche con 50 g de azúcar. Después, montamos la crema con los otros 50 g de azúcar que nos han quedado. Cuando la leche se haya enfriado, será el momento de mezclarla con cuidado con la crema montada. Después, la mezcla se tiene que enfriar en la sorbetera o en otro recipiente que podamos meter en el congelador.
También podemos elaborar el helado propiamente dicho.
Ingredientes (para 4 personas)
- 4 yemas de huevo
- 50 cl de leche
- 100 g de azúcar
Para elaborar un helado, seguiremos la misma técnica que para la crema inglesa: batimos las yemas de huevo con el azúcar hasta que queden blancas. Después, le añadimos la leche hirviendo y calentamos la mezcla a fuego lento, removiendo sin parar hasta que la crema espese. La textura perfecta será cuando se quede pegada a la espátula con la que estamos elaborando la mezcla.
A partir de las dos recetas anteriores, podrás elaborar todo tipo de postres helados:
- Añade especias de buena calidad (rama de vainilla, canela, jengibre, etc.).
- Utiliza diferentes tipos de leche (concentrada, de coco, vegetal, etc.).
- Incorpora chocolate fundido o puré de frutas.
- O simplemente puedes añadirle pepitas de chocolate, virutas, frutos secos o galletas cuando la mezcla esté lista.
Unos truquitos infalibles
Para evitar que el helado endurezca demasiado, utiliza un estabilizador de helados que puedes encontrar en tiendas especializadas. Además, para que el helado sea bien cremoso puedes añadir a tu preparado una cuchara sopera de maicena, féculas, flor de mayo o polvos de crema pastelera como último ingrediente para añadir a la mezcla.
Otra opción es que agregues 20 g de glucosa, miel (neutra, sino dará un sabor demasiado fuerte a la mezcla) o sirope de arroz (lo encontrarás en tiendas biológicas) como primer ingrediente del preparado.
Además de riquísimos, los helados artesanales son mucho más saludables que los comerciales. Así, cuesta mucho menos darse un capricho. De todas formas, si no ves muy claro eso de ponerte el delantar y hacer tus propios helados, aquí te dejamos una lista con nuestras heladerías favoritas. ¿Has probado alguna?
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