La fotógrafa Kate T. Parker dedica su último trabajo a su propio sobrino, Sam, quién acaba de cumplir su primer año de vida, tras ser adoptado en julio de 2014. Parker recoge en la serie, titulada `Blended´, diversas imágenes con los momentos más bellos, íntimos y especiales vividos por Sam y su recién estrenada familia.
Aunque en un primer momento podamos pensar que Sam es el más afortunado después haber sido adoptado por un hogar lleno de cariño y ternura, Kate consigue convencernos, con sus imágenes, de que los verdaderos afortunados son todos los miembros de la familia quienes se sienten "agradecidos y bendecidos" después de su llegada.
El abuelo del pequeño afirma que: “Siendo parte de una familia tan unida es extraordinario ver la reacción que todos tienen hacia Sam y la reacción que Sam tiene siempre hacia ellos. En su primer año ha traído mucha alegría a nuestra familia que, de por sí, ya era muy feliz”.“Poco a poco a comenzado a gatear y a levantarse o dar palmas... pero lo verdaderamente diferente y especial en Sam, respecto a otros niños de su edad, es que, cuando lo coges, te acaricia suavemente la espalda o el pecho como diciendo que todo está bien y que te quiere. Después se acerca a ti para darte un beso sin que se le pidas”.
El abuelo continua: “Me di cuenta de su vulnerabilidad viendo cómo busca el contacto visual desde el otro lado de la habitación, como tratando de asegurarse que realmente sigues ahí. Su sonrisa nos ha iluminado".
Más información: katetparkerphotography.com
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