El procesamiento o pensamiento lógico tiene su origen en el vocablo griego "logos", que se traduce como razón.
Para Jean Piaget, psicólogo, epistemólogo y biólogo, este tipo de procesamiento es el que niño construye en su mente a través de las relaciones con los objetos. Es un pensamiento que se relaciona con los razonamientos matemáticos pero igualmente los ponemos en práctica de manera cotidiana llevando a cabo reflexiones más leves o profundas para solucionar problemas de todo tipo, siendo por ello tan importante afianzarlo bien en el desarrollo de los niños a partir de los 9 o 10 años.
Dado que se aprende mientras el sujeto interactúa con el medio ambiente, y no se trata de una enseñanza directa como por ejemplo lo que se realiza en los colegios, existen muchas situaciones cotidianas que pueden servir de aprendizaje para los niños.
Este tipo de situaciones son generadoras de varias prácticas:
>Propicia experiencias
>Actividades
>Juegos o proyectos en los que los niños puedan observar, explorar, comparar y clasificar objetos
>Enseñarles a pensar por ellos mismos
Todo esto se puede llevar a cabo no haciendo por ellos tareas que estén a su alcance, darles opciones cuando haya un conflicto o haciéndoles tomar pequeñas decisiones en el día a día que vayan fortaleciendo el automatismo con el que poner el práctica la resolución y superación de pequeños impedimentos.
Por ejemplo, las manualidades pueden ser una gran opción para presentar a los pequeños ciertos problemas durante el proceso de desarrollo que les irán motivando para ir dando soluciones... Aquí tenéis algunos ejemplos de las manualidades más divertidas que podéis hacer en familia:
Enseñarles cómo pensamos o tomamos decisiones los adultos, ponerles ejemplos de decisiones difíciles que hayamos tenido que resolver o de cómo las llegamos a concluir también puede ayudarles a tener ejemplos para prevenir un fenómeno de frustración, dado que si no les damos igualmente esa información pensarán que solo a ellos les resulta difícil llegar a resolver problemas presente en su rutina.
El pensamiento lógico se convierte por tanto en una herramienta indispensable para el ser humano en su día a día, consiguiendo gracias a él resolver problemas mediante la observación, el análisis de las opciones, comparación de los pros y los contras de unas y otras llegando así a una conclusión con la que poder solventar conflictos que aparezcan en la rutina.
Por último señalar que las estrategias de las que nos dota el pensamiento de tipo lógico no sólo nos ayudará desde niños en la resolución de cualquier problema sino que también creará una autoestima más fortalecida con recursos mediante los que confiar en nuestros criterios, elemento muy importante a iniciar en la infancia para prevenir una personalidad insegura y dependiente de los otros en la etapa adulta.
Contenido elaborado en colaboración con la psicóloga, sexóloga, grafóloga, perito calígrafo y judicial Ana Perales Martín
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