Tener una mascota en casa tiene muchos beneficios para los niños pero los papás debemos potenciar éstos para que los peques sepan aprender de estos fieles compañeros de vida. Para empezar, aprenderán lo que significa el valor de la amistad, de la responsabilidad que supone el cuidado del animalito y compartir la atención de los demás miembros de la familia con él.
También se convierten en auténticos compañeros de juegos que nunca fallarán a los pequeños, aunque hay que dejarles muy claro que no se trata de un juguete sino de un ser vivo que también tiene sus necesidades al igual que nosotros.
Así lo demuestran estas encantadoras imágenes en las que niños y mascotas muestran que verdaderamente el amor incondicional existe y que tanto el pequeño como el animal se cuidarán mutuamente para siempre.
© Andrey Volobuev
Son muchos los estudios que han determinado el vínculo emocional que se establece entre niños y perros, visto como una herramienta curricular que enriquece el proceso de aprendizaje de estos. Pero también ocurre con los gatos y otras mascotas.
Constituyen un potente motor exterior que contribuye a la formación de los niños en varias facetas: incrementa la motivación, identifica problemas de socialización, fomenta los hábitos de lectura, disminuye la ansiedad, estimula su atención y aumenta su autoestima y confianza, según afirma Purina.
Asimismo, la convivencia entre niños y mascotas desde una edad temprana puede ser una buena escuela para ellos, incluso antes de empezar a ir al cole. Les ayudan a comenzar sus experiencias táctiles, asimilan reglas de comunicación no verbal y desarrollan su capacidad de intuición. ¿Todavía lo estás pensando? ¡Pon una mascota en su vida!
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