Durante años, las mujeres de diferentes culturas han usado una tela o pañuelo para llevar a sus hijos con ellas. Una técnica que no solo les facilitaba la lactancia, sino que también les permitía mantener al bebé con ellas sin necesidad de sostenerlo con los brazos. Algo especialmente útil para las largas jornadas de trabajo o para los viajes en los que necesitaban las manos para transportar otros elementos. A día de hoy esta misma técnica se sigue utilizando. De hecho los pañuelos portabebés (que también reciben el nombre de fulares o cabestrillos) pueden ser muy útiles a la hora de aumentar el contacto físico del bebé con su madre o su padre, lo que trae consigo multitud de beneficios para el niño. Además, ayudan también a potenciar el vínculo con el padre o la madre, les tranquiliza y favorece el desarollo adecuado de la espalda. Y es, sin duda, la opción más práctica para los padres, ¡sobre todo si están ocupados!
Si no tienes muy claro cómo llevar un pañuelo portabebés, te dejamos una galería de imágenes en la que, paso a paso, aprenderás tres métodos diferentes de atarlo: el cruzado envuelto, el doble cruzado y el cruzado sin nudos.
Recomendaciones antes de usar el pañuelo portabebés
Aunque resulta una opción cómoda, si no le damos un buen uso a los fulares portabebés, estos podrían resultar peligrosos para el niño. Para evitar posibles sofocos o asfixias, la Asociación Española de Pediatría ha redactado algunas normas de prevención que debemos tener en cuenta:
Al usar el pañuelo portabebés:
• La cara del bebé debe permanecer siempre visible.
• Debemos vigilar con frecuencia su postura y que respire libremente.
• Evitar que la cara del niño se apoye contra el cuerpo del adulto.
• No utilizar el pañuelo portabebés dentro del coche. Tampoco es aconsejable cocinar con él ni realizar otras actividades que puedan suponer un riesgo para el niño: montar en bici, patinar...
• Comprobar diariamente la tela, las costuras, los pliegues y las cremalleras del pañuelo o fular.
• La posición correcta de la cara del bebé es con la barbilla hacia arriba, la cara completamente visible y la nariz y ojos libres.
¿Qué portabebé debo escoger según la edad de mi bebé?
Lamentablemente, el portabebé perfecto no existe y, por eso, es muy importante saber qué necesita el bebé en cada etapa de su desarrollo. Si todavía no tienes un portabebés para tu pequeño, a continuación te indicamos cuáles son las opciones más indicadas según su edad.
Recien nacidos
Los portabebés en esta etapa, los portabebé deben ser muy delicados con su cuerpo y su piel, ya que a esta edad los bebés son extremadamente sensibles. Aun así, durante estos meses, la cercanía con sus padres puede ser muy beneficiosa y, además, hace la lactancia muy cómoda. La opción ideal a esta edad son pañuelos y fulares elásticos y muy suaves porque recogen al niño en una postura muy similar a la que adoptó en el útero materno. El fular respeta la curvatura natural en forma de C de la espalda del bebé y mantiene sus piernas abiertas a los lados de nuestra cintura. Ten en cuenta que sus rodillas deben quedar un poco más altas que su culito. (Comprar pañuelo portabebé para recién nacido por 57,38€ en Amazon)
Bebés que pueden sentarse por sí mismos
A esta edad, las bandoleras con anilla son muy recomendables. Son muy cómodas para el papá o la mamá y le dan al bebé más libertad de movimiento. Además, es muy fácil de colocar al bebé, a horcajadas sobre nuestra cadera. (Comprar bandolera portabebé por 29€ en Amazon)
Bebés que ya saben caminar
A esta edad pueden comenzar a utilizarse las mochilas ergonómicas ya que su tejido es más resistente y soportan mejor el peso del bebé mientras siguen siendo respetuosos con el desarrollo del bebé y sus posturas. (Comprar mochila ergonómica por 39,99€ en Amazon)
Y más adelante, para que aprenda a andar, quizá os venga bien este otro invento...
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