Que el inglés se ha convertido en el idioma universal es algo de lo que todos somos conscientes y, como consecuencia, su importancia en nuestro día a día es cada vez mayor. Por ello nos preocupamos más por dominarlo y, sobre todo, porque nuestros hijos crezcan haciéndolo desde sus primeros años de vida.
No hay ninguna duda de que todos los padres queremos lo mejor para nuestros hijos, a todos nos preocupa darles la mejor educación. En la actualidad, la importancia de los idiomas se ha impuesto con fuerza en el mercado laboral y eso, con el paso del tiempo, nos ha hecho ver que nuestros pequeños necesitan una formación académica que les permita adquirirlos y que les lleve, en un futuro, a estar plenamente preparados para la profesión que quieran desempeñar. Ahora bien, ¿a qué edad están listos para poder obtener un segundo idioma y convertirse así en personas completamente bilingües?
El aprendizaje de idiomas desde la infancia es muy importante. Podemos decir con total seguridad que cuanto antes se empiece, mejor. Los porqués son muy sencillos y uno de los principales motivos es que, según varios estudios neurológicos, los niños adquieren un segundo idioma de manera mucho más natural que un adulto. Esto se debe, simplemente, a que cuando nos hacemos mayores ya hemos interiorizado nuestro idioma de forma plena.
Por ello, para ayudar a favorecer el desarrollo auditivo y la habilidad para comunicarse en otro idioma, es muy importante que los niños, desde muy pequeños, se acostumbren a escuchar y repetir el vocabulario de éste, como si de la lengua madre se tratase. Si los padres no hablan inglés, siempre se puede buscar un refuerzo como películas en este idioma, la ayuda de una persona nativa que pueda pasar tiempo con el bebé, etc.
Además de desarrollar este aprendizaje (sobre todo cuando son tan pequeños) de una manera divertida y cotidiana, también debemos ser conscientes de que cuando crezcan, habrá que buscar un apoyo académico para seguir con su formación en idiomas. Las opciones son muchas y muy variadas, desde cursos de verano, trimestres o años escolares completos en diferentes centros… Con ello no sólo ayudaremos a la inmersión absoluta en el idioma y en otra educación, sino que nuestros hijos aprenderán a ser autosuficientes y adquirirán valores de compañerismo y tolerancia.
Por otro lado, para aquellos padres que todavía temen a las salidas fuera de nuestro país, también existen programas y campamentos de verano en España mediantes los cuales, a través de actividades específicas, deporte y diversión, los niños podrán seguir practicando y aprendiendo inglés.
Lo que está claro es que los niños, desde que empiezan a hablar, están preparados para aprender un segundo idioma que, además, mejorará su futuro cultural y profesional y les dará la oportunidad de ejercitar su memoria desde sus primeros años de vida. Las ventajas del bilingüismo son infinitas, ya que esta amplitud lingüística también les permitirá convertirse en personas más creativas y les ayudará a sentirse más seguros y tener una mayor autoestima.
Artículo elaborado en colaboración con Verónica González, Directora del Departamento de Programas de Verano de ASTEX.
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