Los cambios nunca son sencillos y cuando se trata de niños, suelen tener una influencia mayor que en los adultos. Uno de estos cambios con los que nuestros hijos tienen que lidiar es la llegada a un nuevo colegio. Ya sea debido a una mudanza, cambio de ciudad o incluso de país, lo cierto es que ser “el nuevo” puede convertirse en una auténtica lucha interna. Para evitar que los niños se sientan inseguros o desubicados, debemos tener en cuenta una serie de consejos que nos ayudarán a que la transición sea más sencilla.
Allana el camino...
>Informar al niño con anterioridad. Con los bebés entre 0 y 5 años no es esencial avisarles con mucha antelación, puesto que no entienden el tiempo como concepto abstracto. Sin embargo, según van creciendo, es importante que sepan que se avecina un cambio, para ir asimilándolo poco a poco. Explicarles los motivos y las novedades, ayudará a que lo entiendan y se sientan partícipes. Además, en el caso de los niños más mayores (pubertad), es importante animarles a compartir su opinión para que se sientan apoyados y comprendidos.
>Evitar las despedidas masivas. A todos nos gustan las fiestas de despedida como broche final a una etapa. Sin embargo, si el cambio de colegio se debe, por ejemplo, a un cambio de ciudad, es importante que no caigamos en la exageración, para que no les suponga una mayor sensación de desarraigo.
>Organizar una visita. Ir a ver el colegio o instituto antes del inicio del curso ayuda a que vayan creando un pequeño vínculo. De este modo el primer día de clase estarán más tranquilos y al menos sabrán dónde está su clase o el gimnasio.
>Actitud positiva. Mantener conversaciones con los niños es muy importante. Por eso podemos, por ejemplo, pedirle que nos cuente los aspectos positivos de este cambio. Es una manera de que aprenda a ver que toda situación puede ser vista como algo beneficioso y que se trata de una experiencia enriquecedora que les ayudará en su desarrollo.
La llegada al nuevo cole
>Todo en la mochila. Los pequeños muchas veces se avergüenzan cuando se les olvida un libro o el estuche. Esta es la razón por la que es muy importante asegurarnos de que tiene todo preparado antes del primer día. Revisar el material con él y colocar la mochila juntos hará que se sienta más tranquilo y seguro de sí mismo.
>Fomentar las nuevas relaciones. Si tu hijo es muy tímido y crees que le puede costar acercarse a otros niños, una idea es organizar juegos junto a otros padres del colegio. De esta manera, le resultará más sencillo entablar conversación e ir conociendo poco a poco a sus nuevos compañeros.
>Mantener el contacto. Aunque cambiemos de colegio, no debemos olvidarnos de los antiguos amigos. Sobre todo en el caso de los adolescentes. Para ello, es recomendable ayudarles a mantener relación con los antiguos compañeros de clase. Las nuevas tecnologías como Skype o FaceTime pueden ser nuestros aliados (siempre con supervisión paterna).
Aplicar estos consejos ayudará a las familias a afrontar la llegada a un nuevo colegio de manera más sencilla. ¡Ya solo queda disfrutar de cada novedad que esté por llegar!
Contenido elaborado en colaboración con Deanna Marie Mason, experta en educación y salud familiar.
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