Una de las tendencias que más popular se ha vuelto durante el último años es el gusto por usar elementos de la naturaleza en la decoración. Ya hemos visto cómo las piñas arrasaron como elementos decorativos, así como también lo hicieron los animales: papeles pintados, vinilos, textiles, esculturas... Cualquier soporte es bueno para introducir un pedacito del reino animal. Pero si hay uno que destaque entre todos ellos es el flamenco. Estas aves de plumaje rosa se ha convertido en la estrella del interiorismo. Podemos conseguir un toque de lo más chic y original con ellos, pero solo si sabemos cómo introducirlos en la decoración. ¡Aquí tienes algunas ideas!
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Paredes
Lo ideal es reservar el papel pintado para cubrir solo una pared y pintar el resto en un color liso. Este método es ideal para resaltar un frente, ya sea el del sofá, la pared del cabecero o una de las paredes del dormitorio. De este modo, aportarás un toque de estilo y personalidad al ambiente sin sobrecargar el espacio
Muebles tapizados
El estampado de flamencos queda especialmente bien en sillones y butacas de línea clásica, pues al ser una tapicería original y divertida, conseguiremos una magnífica combinación. Esta puede ser una buena solución para integrar muebles antiguos en ambientes modernos.
Vajilla
Otra idea para llevar esta tendencia hasta nuestra mesa es emplear vajillas o platos con estampado de flamencos. Son una opción ideal para sorprender a nuestros invitados. Eso sí, ¡evita abusar! Nuestro consejo: combina las piezas decoradas con platos blancos lisos y un mantel en un tono neutro.
Habitaciones infantiles
Una de las estancias donde mejor encajan los flamencos es en las habitaciones infantiles. Textiles, ropa de cama, complementos... ¡las posibilidades son infinitas!
Contenido elaborado en colaboración con Decoratrix.
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