Febrero es el mes más irreverente del año pero también el más romántico. Fiel a su cita, San Valentín vuelve a situarse en el horizonte temporal como el momento más apropiado para celebrar el amor, una de esas costumbres exportadas de tierras lejanas que ha llegado para quedarse. El próximo 14 de febrero, restaurantes de todo el mundo colgarán el cartel de ‘completo’ y es que, son muchos los que deciden disfrutar de la velada deleitando al paladar con un menú con sello profesional. También hay quienes ponen todos sus esfuerzos en encontrar ese regalo singular que derrita el corazón de su destinatarios.
La fórmula de las flores y los bombones se reinventa cada año así que ¿por qué no apostar por una celebración con impronta personal amparada en la intimidad del hogar? Tu casa es el mejor escenario para conquistar a tu pareja o a esa persona tan especial que estás conociendo. Por eso, te contamos 6 trucos para crear el ambiente perfecto en tu casa para San Valentín. ¿Preparado para triunfar con tu cita? ¡Toma nota!
1. Una bienvenida de lujo
La experiencia es un grado y quienes peinan canas entonan, con gran acierto, aquello de “la primera impresión, es la que queda”. Visto así, tu conquista ha de empezar por ofrecer a tu pareja un recibimiento a la altura de las circunstancias. Sin caer en tópicos manidos, el ambiente perfecto para San Valentín empieza desde la entrada.
Un mensaje de inspiración romántica que puedes integrar en forma de vinilo para la ocasión en la pared, una cesta de mimbre con delicias para el paladar o un sencillo ramo de flores en un jarrón atractivo son solo algunas ideas low cost que causarán un efecto arrollador en tu invitado.
2. Una iluminación sugerente
La iluminación será una de tus grandes aliadas a la hora de conseguir el ambiente perfecto para tus interiores en San Valentín. Si pensaste en algún momento en renovar tus lámparas o añadir puntos de luz, tal vez haya llegado la hora de dar el paso. Las luces indirectas son un recurso efectivo para crear una atmósfera sugerente, máxime si buscas inspirar a tu cita para que la velada sea perfecta.
Una lámpara de pie estratégicamente colocada para dar vida a un rincón romántico o unos apliques de pared que propicien una iluminación más tenue pueden ser todo lo que necesitas para que tu salón se transforme en un escenario de película.
3. Una mesa bien vestida
No nos engañemos, el estómago es mucho más que una parte del aparato digestivo y es que, consideraciones biológicas al margen, este órgano puede decantar la balanza hacia el éxito o el fracaso de cualquier cita. Tanto es así que la decoración de la mesa es otro de los aspectos claves si tienes en mente celebrar San Valentín en tu casa. No se trata de recargar el ambiente sino, más bien, dotarlo de los elementos apropiados para que tus creaciones culinarias seduzcan a primera vista. ¿Recuerdas esa vajilla que coge polvo en un armario porque nunca encuentras la ocasión para sacarla a pasear? Pues ha llegado su hora. Esmérate en la presentación ya que, al igual que en el caso de la decoración del recibidor, una mesa bien vestida puede causar un efecto revelador para los sentidos.
Eso sí, del mismo modo que debes cuidar la ambientación, ten presente que no es el mejor momento para innovaciones culinarias. Elaborar una receta que te salga bien aunque sea más sencilla, es una apuesta segura y, con una buena decoración del comedor (en el caso de que tu cita sea en horario de comida o cena), tendrás la mitad del camino hecho.
4. Flores y aromas
La seducción es un arte y, por eso, es tan importante alcanzar el ambiente perfecto en casa en San Valentín. Llegar al corazón de tu pareja es tan sencillo como ir ganando batallas a los sentidos. La vista, el gusto, el oído, el olfato y, con suerte, el tacto. Si no quieres dejar al azar la conquista de cada uno de ellos, no debes descuidar ningún aspecto. Los aceites esenciales y las velas aromáticas son todo un clásico, lo mismo que las flores. No obstante, su tradición en esta fecha tan señalada no resta un ápice de efectividad a su presencia y es que, en la práctica, todo suma.
5. Sorprende con detalles
El factor sorpresa tiene tantos defensores como detractores pero lo que es innegable es la capacidad de despertar emociones que supone cualquier detalle inesperado. Adornar una mesa, colocar unas velas u ofrecer algún presente personalizado es algo relativamente previsible, por eso, has de buscar darle una vuelta de tuerca a tu ambientación para San Valentín.
Evocar recuerdos compartidos, emociones vividas o deseos de futuro tiene una carga emocional que trasciende de la decoración. Unos mariachis entonando una ranchera romántica bajo el balcón pueden causar furor pero, en términos de diseño de interiores, resultan poco prácticos. Sin embargo, una composición de fotos como parte de la atmósfera romántica de la cita, unos accesorios que denoten el amor que profesas a tu pareja o unas sencillas copas al calor de un buen fuego son recursos menos espectaculares pero igualmente efectivos.
6. Pura pasión
Tu celebración del amor en el día de San Valentín puede tener multitud de escenarios. Por eso, es importante que cuides cada detalle para que todo sea perfecto. Si prevés que la cosa puede ir a mayores, no está de más dedicarle una atención especial al dormitorio. La estancia reservado a la intimidad es, con diferencia, la habitación que más seductora debe resultar.
¿Siempre soñaste con un dormitorio digno de reyes? Entonces ¿por qué no transformar el tuyo en un escenario de cuento? A nadie le amarga un dulce y, llegados a este punto, puedes tomarte la licencia de introducir en la decoración tantos tópicos románticos como consideres oportunos: pétalos de flores sobre la cama, un dosel y hasta un par de copas con champán serán un fin de fiesta perfecto para tu cita de San Valentín.
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