Para los amantes del cine la idea de tener una habitación de la casa solo destinada a la proyección de películas es casi un sueño. Pero tampoco es necesario desembolsar una gran cantidad de dinero para conseguir acondicionar una sala para disfrutar del séptimo arte.
Una pantalla HD (en su defecto un proyector), un home cinema o un reproductor blueray y unos buenos altavoces envolventes son la clave para conseguir tener un cine en casa, pero debes tener en cuenta una serie de consejos para que el ambiente que rodee a tu particular sala de cine sea el apropiado para disfrutar 100% de tus películas preferidas con amigos y familia.
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-Colores oscuros: los colores más intensos y oscuros serán los más apropiados para este tipo de salas: azul marino, negro, gris... Lo que evitaremos con ello son la aparición de brillos y sombras.
-Paredes sin decorar: obviamente donde queremos centrar la atención es en la pantalla de cine por lo que las paredes no deben tener una decoración llamativa. Podremos encuadrarla con algunas molduras o determinados límites que nos ayuden a centrar la mirada en ella, con esto sería suficiente.
-Ventanas: para evitar reflejos de luz se recomienda que la habitación no tenga ninguna ventana, pero en su defecto puedes hacerte con unas cortinas tupidas que tapen cualquier halo de luz que pueda molestar durante la sesión de cine.
-Altavoces: puedes ahorrar espacio colgandolos de las paredes en lugares estratégicos pero si lo prefieres puedes escogerlos "de pie" para rodear toda la sala. Y por supuesto, no conviertas tu sala en una maraña de cables, sé cuidadosa a la hora de colocarlos y recógelos de forma que queden escondidos o por lo menos ordenados. La sensación de tener cables por el suelo es muy fea y quitará mucha elegancia al espacio.
-Muebles y accesorios: por supuesto, te compensa invertir en unos buenos sillones y sofás y es que no hay mejor sensación que ver una buena película o un partido de fútbol en un lugar cómodo y confortable. Las mesitas auxiliares se hacen imprescindibles para apoyar las bebidas y por supuesto, ¡las palomitas de maíz!
La disposición de los asientos corre a tu cargo. Será tu decisión si quieres que la sala se parezca a una sala de cine de verdad, en ese caso los sillones individuales serán los protagonistas o por otro lado, quieres darle un ambiente más familiar con un sofá amplio con varias plazas.
Y por supuesto, te queda lo más importante, ¡elegir peli! Aquí te dejamos con algunas de los mejores largometrajes de ciencia ficción que nos ha dejado el cine, ¿con cuál te quedas?
© Wonder Woman
-Iluminación: la iluminación debe ser tenue y casi imperceptible por eso cuando la sala se utilice para una proyección las luces deberán estar apagadas. Lo que sí podemos contar es con alguna iluminación indirecta o auxiliar que nos puede venir bien si nos tenemos que mover de nuestros sitio en algún momento de la película. Un consejo: si te haces con una iluminación que se pueda regular de mayor a menor y viceversa, ¡será perfecto!
-Alfombras: por último, no pueden faltar las mantitas para esas tardes de invierno frías y lluviosas en las que lo que más apetece es ver una buena peli en casa. Pero, ¿qué te parecen las alfombras? Éstas proporcionan una mejor acústica en la sala y aportarán una sensación de mayor calidez a la estancia.
El resto de la decoración corre totalmente a tu cargo. Todos los accesorios que quieras introducir en tu cine en casa serán con los que más te identifiques o mejor se adapten a tus necesidades: una barra con taburetes altos, una máquina de hacer palomitas, pósters de tus películas favoritas, recrear una sala temática como por ejemplo, de Star Wars... ¡Qué comience la sesión!
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