El lifting de fascias es un tratamiento médico estético realizado por profesionales especializados. Se suele utilizar en el postoperatorio de lifting facial para acelerar la recuperación del paciente en general, y de los tejidos trabajados, en particular. Pero si por algo es novedoso este tratamiento es porque está indicado para aquellos pacientes que todavía no necesiten cirugía o simplemente, no quieran renunciar a un aspecto más joven sin tener que pasar por quirófano.
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¿Qué son las fascias?
Seguramente, muchas de vosotras os preguntaréis, ¿qué son las fascias? Se trata de un tejido conjuntivo que recubre los músculos, los conecta y aísla las estructuras más profundas de nuestro cuerpo. Además, tiene un gran poder de deslizamiento y desplazamiento. Esto explica que el tratamiento de lifting de fascias bioenergético trate los músculos faciales a base de movimientos lentos, así como las fascias que rodean estos músculos.
¿En qué consiste este tratamiento?
El efecto que se consigue es la recolocación de volúmenes de forma inmediata: las cejas suben, los ojos se abren y los pómulos resurgen. Pero esta técnica no solo trabaja el rostro, sino que el tratamiento comienza boca abajo con un masaje corporal. En primer lugar, se trabajan la espalda y los omoplatos, se prosigue con la recolocación de las fascias de esta zona mediante movimientos muy sutiles y la disolución de las pequeñas adherencias que puedan existir en los músculos. Pero como decíamos, también tiene un componente bioenergético por lo que se tienen en cuenta también la liberación de tensiones acumuladas en esa zona trabajando la expansión y apertura de distintos puntos activando nuestra propia energía Qi
(técnica que pertenece a la cultura tradicional china y podemos definir como "el flujo vital de energía").
La sensación es de relajación total y notarás cómo tu cuerpo descansa y libera tensiones tras finalizar la primera sesión. Puede que durante la primera experiencia tu cuerpo se muestre más reacio a los movimientos que te practique el técnico, ya que se trata de una liberación total de todos los músculos. Pero los expertos afirman que en sesiones posteriores los músculos están cada vez más relajados, lo que facilitan el trabajo y aceleran los resultados.
El tratamiento dura aproximadamente 1 hora y media y es perfectamente combinable con otras técnicas aplicables como el bótox, el ácido hialurónico, peeling químico... "Lo ideal es realizar este tratamiento una vez por semana hasta conseguir los resultados deseados y después realizar sesiones de mantenimiento", según Virginia González de Águila, experta en tratamientos estéticos de la Clínica Doctor Moisés Martín Anaya. Pero, esto no es todo ya que el lifting facial de fascias "también puede ser practicado como un tratamiento terapéutico gracias a su técnica puramente manual, sin la aplicación de ningún tipo de producto; simplemente los movimientos lentos y descongestionantes que se realizan en músculos y fascias. En pocas sesiones notas cómo tu rostro se destensa y se recolocan los volúmenes", nos cuenta Virginia.
Puedes consultar toda la información que necesites en la web de la Clínica Doctor Moisés Martín Anaya.
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