Hay días en los que nos levantamos y parece que nada puede ir peor. Esos días en los que necesitamos un abrazo de las personas que más queremos o una sonrisa amable que nos devuelva esa fe en la humanidad que hace tiempo perdimos. Nosotras queremos que hoy salgas a la calle con la cabeza muy alta y dispuesta a comerte el mundo. Para devolverte esa dosis de optimismo que necesitas, nada mejor que ver estas imágenes que hemos encontrado y que nos invitan a disfrutar de la vida cada minuto:
Y, ¿con qué nos hemos topado en este recorrido? Hemos visto a ancianos dispuestos a sacarle el máximo partido a su vejez. También a niños capaces de chillar, jugar, imaginar y reír en los países más desfavorecidos del mundo. Y, ¿qué podemos decir de esa forma de derrochar felicidad de algunas personas discapacitadas? ¡Todo un ejemplo a seguir!
Cuando tenemos esos días malos en los que creemos que nada puede ir a peor, podemos pensar en todas las mujeres que defendieron nuestros derechos y aprendieron a disfrutar de su vida con total libertad. Estas fotografías nos han enseñado que podemos encontrar una cara amable incluso cuando estamos inmersos en una guerra. Y es que el ruido de los disparos se puede quebrar con una simple flor y se pueden ver soplos de humanidad tras las trincheras. Todo un repaso por esos momentos irrepetibles que nos hacen amar la vida y saber que, poniendo un poco de nuestra parte, el mundo puede convertirse en un lugar maravilloso.
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