Hablar más honestamente de sexo puede mejorar la calidad de nuestra vida sexual. Más allá de la mera conversación, durante el orgasmo, los gritos, gemidos y jadeos se alzan como un código propio de comunicación durante el sexo. Conscientes de su significado trascendental, la firma Bijoux Indiscrets acaba de lanzar una Librería de Orgasmos Reales, que da a las mujeres la posibilidad de grabar y compartir de forma anónima el sonido de su orgasmo. El objetivo: iniciar una conversación que permita romper los tabúes sobre sexualidad femenina.
Algunos datos importantes
- El 22,5% de las mujeres españolas no llega al orgasmo nunca o casi nunca durante las relaciones sexuales.
- Muchas se sienten tan presionadas para alcanzarlo (y alcanzarlo del modo en que sus parejas masculinas están esperando) que el 52% acaban por fingirlo de vez en cuando, y el 11,8% siempre.
- El 84% de los hombres no son conscientes de cuándo fingimos.
¿Cuáles son las razones de estas cifras? Según Ana Lombardía, Sexologa y Terapeuta de Sex Academy y autora del blog sexoenlapiel “Muchas de estas personas consiguen llegar al orgasmo con facilidad masturbándose a solas pero, cuando están en la cama con sus parejas, no llegan”. De ahí que “la gran mayoría de las mujeres haya fingido un orgasmo en uno u otro momento de su vida”.
El 84% de los hombres no son conscientes de cuándo fingimos un orgasmo.
Más de 700 mujeres graban y hacen público su orgasmo real
La librería de Orgasmos Reales cuenta ya con 750 orgasmos reales procedentes de 51 países diferentes, incluidos algunos conocidos por su cultura represora de la sexualidad femenina como India, China, Arabia Saudí o Pakistán y otros más liberados como Corea del Sur o los países occidentales.
España, Estados Unidos, Alemania, México y Colombia son las cinco nacionalidades que más han contribuido con sus orgasmos, mientras que Estados Unidos, Alemania, China, España y México han sido sus principales "consumidoras", fundamentalmente en franjas horarias nocturnas.
Las grabaciones, que eran acompañadas de pequeñas descripciones para dar contexto al estudio de la marca sobre la realidad del sexo, han permitido conocer las preferencias de mujeres de todo el mundo respecto a zonas erógenas, lugares preferidos para practicar relaciones o para masturbarse, e incluso sensaciones y estados de ánimo que provoca un orgasmo.
¿Dónde, cuándo...?
Según Elsa Viegas de Bijoux Indiscrets, “La ficción nos enseña una cosa, pero la realidad nos demuestra otra. El cine, incluyendo el porno, nos vende que el placer femenino sólo se consigue mediante penetración, no obstante, casi el 80% de los orgasmos donados en la librería son alcanzados mediante estimulación externa, es decir, del clítoris".
Casi el 80% de los orgasmos donados en la librería son alcanzados mediante estimulación externa.
"En la ficción las mujeres no suelen masturbarse, la única manera de alcanzar su orgasmo es acompañadas, sin embargo más de la mitad de los orgasmos donados son grabados a solas. Viendo estas contraposiciones, no es una sorpresa que muchas mujeres lleguen a sentirse frustradas cuando no alcanzan el orgasmo con sus parejas; o lleguen a pensar que tienen problemas físicos; problemas que pueden resolverse con información REAL capaz de borrar prejuicios y tabúes sociales”, añade Viegas.
Conclusiones
De los datos extraídos del banco de orgasmos se desprende que "no hay un sólo camino al orgasmo", explica la sexóloga, periodista y escritora Silvia C. Carpallo. "Se desmitifica la dicotomía entre clítoris y vagina, por lo que podemos afirmar que el orgasmo es uno y los caminos para alcanzarlo son infinitos, teniendo en cuenta que cualquier parte de nuestra anatomía, si sabemos estimularla, puede llevarnos al éxtasis. Las mujeres del estudio nos muestran que tienen muchas técnicas y herramientas para masturbarse, y que no solo lo hacen en la intimidad de su casa, sino que son capaces de buscar su orgasmo en lugares como el coche o el trabajo, quizás como un remedio efectivo contra el estrés y como fuente de bienestar. Parece que cada vez tienen más claro que el autoerotismo no es un tabú, sino que es salud".
Cualquier parte de nuestra anatomía, si sabemos estimularla, puede llevarnos al éxtasis.
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