Tras una década en la que las listas de bodas lucían por su ausencia, muchas parejas han decidido retomar esta útil práctica e incluirlas en sus invitaciones apostando, ante todo, por la transparencia. Nada de listas ficticias para pagarse luego el viaje de novios, mejor recurrir al concepto más tradicional de lista de boda y sacarle partido porque, nos guste o no, soluciona muchos quebraderos de cabeza. Para empezar, la mayoría de parejas que deciden pasar por el altar (o por el Registro Civil) ya viven juntas. Lo que necesitan, por tanto, no es conformar un “ajuar” al uso sino darle un toque nuevo a la casa en la que ya comparten techo, o en su defecto, terminar de amueblar su vivienda (probablemente, llena de muebles que uno y otro fue comprando por su cuenta y que carecen de conexión alguna).
Es el momento, por tanto, de buscar piezas que encajen con lo que ya tienen y, por qué no, de darse un capricho y hacerse con ese mueble que siempre deseaste y nunca te atreviste a comprar. La diseñadora e interiorista Sandra Marcos nos ha dado muchas claves de cómo sacar el máximo partido a tu lista de boda y ahorrarte disgustos posteriores con piezas excesivamente vanguardistas que, en menos de lo que canta un gallo, estarán pasadas de moda. Puedes ver algunas de sus sugerencias en la galería.
Visualiza tu casa ideal
Tienes la excusa perfecta para renovar tu casa e intentar que se parezca a la que llevas años soñando y viendo en las revistas de decoración. Quizás no sólo se trate de hacerte con unos bonitos muebles sino de aprovechar para hacer esa pequeña obra para agrandar el salón o la cocina, pero ¿quién dijo miedo? Cuando vuelvas del viaje de novio, ¡no querrás salir de tu casa!
Haz un listado realista y apto para todos los bolsillos
Casarse significa compartir ese día tan especial con familiares y amigos que, obviamente, quieren agradeceros la invitación con un detalle. Pero no se trata de sacarles los cuartos, así que elabora una lista de regalos con distintos precios para que cada uno pueda elegirlos según sus condiciones económicas.
Elige una pieza especial
El punto anterior no es óbice para incluir, dentro de la lista de boda, una o dos piezas especiales e inolvidables, como una cómoda, una mesa de comedor o un cuadro. Quizás una persona sola no pueda comprarla, pero sí junto a otras que también quieran regalarte lo mismo. En este caso, será imprescindible que tengas confianza con la persona responsable de la tienda donde decidas poner la lista de bodas, ya que se convertirá en tus ojos allí y, llegado el caso, podrás proponer a tus invitados compartir gastos.
Incluye espejos y lámparas
Nunca (e insistimos, nunca) te podrás arrepentir de incluir en tu lista de bodas objetos que aporten luz y espacio a tu casa. Así que escoge, como mínimo, un par de lámparas de sobremesa y un buen espejo. Conseguirás una casa más amplia y acogedora en un abrir y cerrar de ojos.
¡Y no te olvides de la lista foodie!
Te guste o no cocinar, lo cierto es que siempre te surgirá una ocasión para tener comensales en casa. Y una mesa bonita, a veces, es mejor que un menú digno de estrella Michelin. La mayoría de nosotros come por los ojos y no hay mejor manera de ser un anfitrión o anfitriona 10 que con una vajilla polivalente, moderna y práctica. No hace falta que tengas 12 platos de todo, combina piezas entre sí y arriesga con la cubertería y los vasos.
Siguiendo estos sencillos pasos, y siempre que tengas boda a la vista, podrás renovar tu hogar y convertir en realidad tu casa ideal. Es importante también saber dónde poner la lista de bodas, no vale cualquier tienda. Si quieres que sea especial, elige una que te dé confianza y donde te ofrezcan asesoramiento gratuito. Porque solo profesionales del sector de la decoración y el interiorismo te ayudarán a elegir esas piezas que nunca fallan. Tu madre, tía o abuela seguramente tienen muy buenas intenciones, pero no te aconsejarán con la visión a largo plazo de los expertos en la materia. ¡No lo dudes!
LETTER
Y además:
Listas de boda: regalos originales
Qué regalar a una futura novia