Es una de las protagonistas indiscutibles de cualquier boda que se precie, con el permiso, claro está, de los novios y el vestido. Recibe las miradas de todos los invitados y ocupa un momento clave cuando los novios llevan a cabo el tradicional corte y reparto.
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Hablamos, por supuesto, de la tarta de boda. Un “complemento” muy importante que puede dar muchos quebraderos previos de cabeza a los novios que buscan la perfección en todos los detalles, pero también emotivos momentos y deliciosas sorpresas que pongan el broche de oro a un enlace.
Las hay grandes, pequeñas, altas, achatadas, rellenas, de varios sabores, para los apasionados del chocolate o para quienes se lo juegan todo en la estética, sin importar el sabor, con tal de que combine con la decoración.
Los pasteles de boda, como el resto de detalles nupciales, buscan diferenciarse cada vez más. Las parejas buscan la “receta” del éxito a costa de composiciones imposibles, formas nunca antes vistas, mezclas de colores futuristas o acabados llenos de glamour y elegancia.
Por esta razón, y siendo conscientes de lo complicado que es encontrar esa tarta que cumpla tantos requisitos a la vez, hemos seleccionado algunas de las más “especiales” vistas en los últimos tiempos, ya sea por lo recargado del estilo, por la sencillez de sus diseños o por el espectacular resultado final. Es probable que no todas te gusten pero está claro que todas terminarán por dejarte un buen sabor de boca.
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